Diferencias entre antibiótico y antigripal
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POR: Salud180.com
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Al enfermarnos de gripe o resfriarnos, una duda común es: ¿qué tomo? Pues no es opción sentirte mal, en especial si tienes que cumplir con tu rutina diaria. Sin embargo, un error que muchos cometemos, es tomar el medicamento incorrecto. Para que no te pase, conoce las diferencias entre antibiótico y antigripal.
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Típico que de un momento a otro empiezas con estornudos, congestión nasal, tos, cuerpo cortado o dolor de garganta, lo cual te da un indicio de que estás sufriendo de un resfriado o gripe. Si aún tienes dudas para identificar cada uno, te ayudamos.
Y claro, a nadie le gusta sentirse mal, mucho menos cuando tienes que trabajar o cumplir con un compromiso importante, entonces lo primero que haces es buscar en tu botiquín algo que te funcione y quizá encuentres dos opciones: antigripal o antibiótico. Si crees que es mejor tomar el segundo porque así “te curas más rápido”, mejor detente.
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Antigripales, tus aliados para acabar con los síntomas
De acuerdo a la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica de Argentina, hemos vivido en un error, pues la realidad es que los antigripales no curan la gripe. Su función es únicamente aliviar los síntomas de la enfermedad, mas no actúan sobre lo que lo causa: un virus.
Estos medicamentos pueden incluir: antitusivos (alivian la tos), descongestionantes nasales (destapan la nariz), antihistamínicos (paran la congestión nasal y estornudos), expectorantes (ayudan a aflojar el moco), y antiinflamatorios no esteroideos (analgésicos y antifebriles), de ahí la importancia de elegir el correcto según tus síntomas.
De acuerdo a la Food & Drug Administration, son seguros para tratar los síntomas del resfriado o la gripe si lees con atención la etiqueta y sigues las instrucciones, además de consultar a tu médico en caso de tener alguna enfermedad crónica.
Sin embargo, la principal recomendación frente a estos padecimientos, siempre será descansar, mantenerte hidratado, reducir tu contacto con personas e incluso usar soluciones nasales, pues la mayoría de los resfriados se curan después de un par de días.
Asimismo, la influenza o gripe, suele desaparecer por sí sola, aunque dura un poco más que el resfriado. En ciertos casos (cuando hay riesgo de complicaciones o la enfermedad es más grave), es posible recetar algún antiviral, que ataca al virus, para reducir la duración de la enfermedad y prevenir que escale.
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Los antibióticos no curan la gripe
Esa es la principal razón por la que no debes tomarlos en estos casos. Los antibióticos han sido creados para combatir infecciones causadas por bacterias, no por virus. De hecho, se trata de medicamentos muy importantes, pues ayudan a evitar la propagación de enfermedades y reducción de complicaciones.
Por eso, especialistas de Mayo Clinic destacan la importancia de no tomarlos a la ligera o cuando no son necesarios. ¿Qué pasa si los tomas cuando tienes gripe? Además de no curarla ni impedir que sigas contagiando, el riesgo va más allá, pues promueves la resistencia a los antibióticos
Esto significa que un antibiótico deja de ser efectivo a determinada cepa de bacterias y cuando una bacteria sobrevive a este tratamiento, puede multiplicarse y transmitir sus propiedades de resistencia. Esto puede pasar con el tiempo, pero aumenta su rapidez si tomas antibióticos cuando no son necesarios.
Ahora entiendes por qué estos medicamentos requieren receta médica, pues es muy fácil automedicarse de manera incorrecta y provocar un daño a largo plazo, además de matar a las bacterias saludables de tu cuerpo y ponerte en riesgo de una reacción alérgica.
Ahora ya lo sabes, cuándo usar cada uno, ¡no te arriesgues ni automediques! Ah y ojo, es muy importante que frente al Covid-19, evites tomar antigripales, en especial si tus síntomas están relacionados con este virus. Lo mejor es consultar a los servicios de salud en sus diferentes medios para evitar “enmascarar” o retrasar los síntomas.
