Esto es lo que debes hacer para controlar la hipertensión y evitar un paro cardíaco

La hipertensión es una enfermedad que preocupa a todos, principalmente por el daño que provoca al corazón y su relación con los infartos cardíacos. Si la padeces, es importante apegarte a tu tratamiento, pero ¿te imaginas que tomar una siesta diario pudiera ayudarte a combatir la hipertensión? Eso fue lo que descubrieron en un estudio.

La primera estrategia contra este padecimiento es la prevención, la segunda el diagnóstico y su posterior tratamiento, pues aunque puede manifestar señales como dolor de cabeza, vértigo o hemorragias nasales, en general es silenciosa. Afortunadamente la ciencia ha avanzado y existen tratamientos para controlarla y prevenir riesgos, pero también investigaciones encargadas de buscar nuevas estrategias para su combate.

Una de ellas fue presentada en la 68° Sesión Científica Anual del Colegio Americano de Cardiología, donde se llegó a la conclusión de que las personas que duermen la siesta a mediodía tienen mayores probabilidades de disminuir la presión arterial, en contraste con quienes no lo hacen.

En la investigación participaron 212 personas de una edad promedio de 62 años y una presión media de 129,9 mm Hg, algunos fumadores y/o con diabetes tipo 2. Se evaluó y registró su presión arterial (24 h seguidas), el tiempo de siesta (49 minutos en promedio), estilo de vida y velocidad de la onda del pulso.

Los resultados revelaron que aquellos que tomaron una siesta, tuvieron una presión sistólica promedio de 24 horas, 5,3 mm Hg más baja que quienes no la tomaron. Esto es muy positivo, pues según uno de los implicados en el estudio, el cardiólogo del Asklepieion General Hospital de Voula, Manolis Kallistratos, con una caída de sólo 2 mm Hg es posible reducir el riesgo de eventos cardiovasculares como un ataque al corazón, hasta un 10%.

Al parecer este hábito tiene el mismo impacto que otros cambios como bajarle al consumo de sal y alcohol, que llegan a reducir los niveles de presión arterial entre 3 y 5 mm Hg. Y si se compara con con un medicamento de dosis baja que logra una disminución de entre 5 y 7 mm Hg, la cifra no es nada desperciable.

Aunque se trata de un primer estudio, los resultados son alentadores para aquellos que sufren de hipertensión y además aman y pueden tomar una siesta. Claro, no se trata de controlar la presión únicamente con siestas, sino de utilizarlas como un refuerzo del tratamiento prescrito por tu médico.

Según especialistas de Mayo Clinic, si sientes fatiga o somnolencia repentina, o te espera un turno largo de trabajo que te hará perder horas de sueño, tomar una siesta es buena idea. Aunque si lo haces por gusto o costumbre, tiene los mismos beneficios, como:

- Relajarte.

- Disminuir tu fatiga.

- Ponerte en mayor estado de alerta.

- Mejorar tu estado de ánimo.

- Hacer que tu desempeño mejore, al tener una memoria más aguda y reacción más rápida.

- En el caso de los niños y adolescentes, los ayuda con su crecimiento, pues la hormona del crecimiento se libera al descansar.

Ya conocías los beneficios de dormir 7 u 8 horas diarias para tu salud, pero ahora ya no tendrás que sentirte culpable por tomar una pequeña siesta a mediodía o después de comer, al final de cuentas estás cuidando tu corazón.