Consecuencias de tener un padre ausente. Cuando el instinto paternal desaparece

Los retos de la crianza deben ser una responsabilidad compartida porque de no hacerlo, los hijos tienen afectaciones en su salud mental, por ello te contamos cuáles son las consecuencias de tener un padre ausente. 

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¿Cómo afecta la ausencia de un padre a un hijo?

De acuerdo con un artículo publicado en la Revista Latinoamericana de Ciencias Sociales, Niñez y Juventud, las afectaciones por un padre ausente en niños puede generar:

• Depresión
• Estigmatización
• Soledad
• Desprotección 
• Culpa
• Rechazo

Entre otras afectaciones que suceden no sólo durante la niñez sino que se pueden extender a la adolescencia. 

Además, las consecuencias de tener un padre ausente se hacen más graves por el entorno social y escolar que suele separar o tratar con compasión a los hijos de padres ausentes, lo cual sólo aumenta la inseguridad de estos niños y futuros adultos. 

Si bien es cierto que la familia no tiene números para considerarse familia, sí resulta conflictivo para muchos pequeños el pensar que su familia está rota, incompleta o que ellos son los responsables de que su padre o madre no esté con ellos, por lo que esto podría desencadenar cuadros de depresión y ansiedad infantil. 

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¿Qué es ser un padre ausente?

Los padres ausentes son aquellos que por cuestiones personales, de trabajo, enfermedad, etc, no pueden proporcionarle suficiente atención o interés a las vidas de sus hijos. 

También se le conoce como padre ausente a aquella figura (paterna o materna) que deliberadamente abandona en núcleo familiar y corta contacto con la pareja y con los hijos. 

Y aunque la persona intente seguir buscando a sus hijos de vez en cuando, busca no hacerse cargo más allá de mandar aportación económica (en el mejor de los casos), sigue considerándose como un padre ausente porque no se involucra en la crianza de los hijos. 

Dar aportaciones económicas de forma periódica no implica que el padre esté presente. 

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¿Cómo curar las heridas de un padre ausente?

Las consecuencias de tener un padre ausente pueden calar hondo en la salud física y emocional de los hijos y la pareja, sin embargo hay algunas maneras en las que puedes tratar de sanar la herida de abandono por un padre ausente. 

La primera es trabajar con la culpa que no te pertenece, puedes escribir tus pensamientos o grabarlos en voz alta siempre procurando hablarte desde el amor y la compasión. Aceptar que debes liberar una carga que no es tuya, tú no fuiste ni eres responsable de que tu padre o madre se hayan ido o no hayan estado presentes. 

Puedes intentar perdonar desde la empatía, entender que quizá tus padres no tuvieron oportunidad ni energía mental para dedicarte tiempo pero no por maldad, sino por las circunstancias. Este paso depende de cada historia.

Aceptar tus sentimientos: Puedes dejarte guiar por tus emociones sin intentar reprenderlas o racionalizarlas, esto también te quitará muchas cargas.

Escribe una carta: Esta opción es muy buena porque te permite escribirles una carta a tu padre o madre ausente donde externes todo lo que te hicieron sentir y puedes decidir si al final la quemas o se las entregas desde el amor y no el resentimiento. 

Si consideras que las heridas por tener un padre o madre ausente siguen ahí, lo mejor es buscar atención profesional porque usualmente las consecuencias de tener un padre ausente son difíciles de detectar y de perdonar.

Sin embargo, atreverte a dar ese salto de perdón puede transformar tu vida y la forma en la que entiendes todas tus relaciones. Aprender desde el amor y el conocimiento de que somos humanos que cometemos errores puede traer mucha paz a tu vida.  

Si deseas saber más sobre la influencia de los padres en el comportamiento de los hijos, te recomendamos este video.