Dolor de glúteo, entumecimiento y otras señales que podrían revelar una hernia discal

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Dolor de glúteo, entumecimiento y otras señales que podrían revelar una hernia discal Foto: iStock
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POR: Salud180.com

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18-11-2020

Pasar muchas horas sentado puede hacer que se te duerman e incluso duelan los glúteos, sin embargo, estos síntomas podrían ser señal de algo más. Descubre cómo el dolor de glúteo, entumecimiento y otras señales podrían revelar una hernia discal.

 

Levante la mano quien ha sufrido de “adormecimiento del trasero” por pasar muchas horas sentado. Creo que la mayoría, si no todos, lo hemos padecido alguna vez, ya sea por trabajar, leer, ver una película o viajar, por suerte basta estirarnos para que las molestias desaparezcan, ¿pero qué pasa cuando no es así?

 

Hay ocasiones donde el dolor de glúteo permanece o, peor, sentimos un entumecimiento u hormigueo en alguna de nuestras extremidades. ¿Es algo de lo que deberíamos preocuparnos?

 

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¿Qué es una hernia discal?

La hernia discal aparece cuando uno de los discos ubicados entre las vértebras en la columna vertebral, y encargados de amortiguar y mantenerlas en su lugar, se sale de su lugar o se rompe, provocando que la sustancia gelationosa de su interior, se escape e irrite los nervios cercanos.

 

De acuerdo a la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, la también llamada hernia de disco, puede provocar ciática o dolor de espalda. En ese sentido, la parte baja de la columna o zona lumbar, es la que suele ser más afectada por este tipo de hernias, seguida por la zona cervical.

 

¿Cuáles son los síntomas de una hernia discal?

  • Dolor en los glúteos, muslo y pantorrilla, si tu hernia es en la zona lumbar, incluso puede afectar parte del pie.
  • Dolor en el hombro y brazo, si el disco afectado está en el cuello.
  • El dolor puede manifestarse al cambiar de posición, estar mucho tiempo parado o sentado, al estornudar, toser o reírse, después de caminar por un tiempo, hacer esfuerzo o retener la respiración, y se describe como agudo o ardiente.
  • Entumecimento u hormigueo en los nervios afectados por la hernia.
  • Debilidad en los músculos servidos por los nervios afectados, esto puede afectar tu capacidad para levantarte o sostener objetos, de acuerdo a especialistas de Mayo Clinic.

 

Los síntomas dependen del disco afectado y si presiona algún nervio, aunque algunas personas pueden no presentarlos. Sin embargo, es importante que si manifiestas síntomas, debilidad o entumecimiento, acudas a tu médico para que te realice estudios y dé tratamiento.

 

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¿Por qué salen las hernias discales?

Los discos suelen salirse de su lugar o herniarse por una lesión o distensión. Muchas veces la causa se relaciona a un desgaste natural relacionado con el envejecimiento, pero también puede ocasionarse por levantar objetos pesados o torcerse.

 

Conforme envejecemos, existe una degeneración discal, es decir, los discos se vuelven menos flexibles, lo cual los vuelve propensos a desgarrarse o romperse. Asimismo, una mala postura al cargar objetos pesados, por ejemplo, usar los músculos de la espalda en lugar de las piernas y muslos, puede llevar a una hernia de disco.

 

De acuerdo a los especialistas, los más afectados por este problema son los hombres de mediana y avanzada edad, aunque también el sobrepeso u obesidad, los trabajos físicamente exigentes, el tabaquismo e incluso la genética, pueden ser factores de riesgo para desarrollarlas.

 

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¿Se puede vivir con una hernia de disco?

Aunque es raro, en ocasiones las hernias discales pueden comprimir el canal medular, lo que requeriría cirugía urgente para evitar la parálisis permanente, destacan especialistas de Mayo Clinic.

 

Por lo tanto, si tus síntomas empeoran, sufres incontinencia urinaria o al defecar, dificultad para orinar o pérdida de la sensibilidad en muslos, parte posterior de las piernas y alrededor del recto, debes acudir inmediatamente al doctor.

 

De lo contrario, en el Manual MSD especialistas revelan que los discos herniados suelen encogerse con el tiempo y con eso disminuyen los síntomas, por lo que la mayoría de las personas pueden recuperarse aun sin tratamiento dentro de los primeros 3 meses.

 

Sin embargo, existen tratamientos y medidas de cuidado personal que se pueden aplicar para ayudar a controlar el dolor. Entre las medidas médicas se encuentran los analgésicos de venta libre, inyecciones de cortisona, relajantes musculares e incluso opiáceos, siempre recetados por un médico y de acuerdo a tu caso.

 

Asimismo, se puede recomendar la fisioterapia e incluso cirugía, pero esta última en casos remotos y generalmente si otros tratamientos no logran mejorar los síntomas o en caso de emergencias.

 

Por otro lado, puedes aplicar frío o calor en la zona para aliviar el dolor e inflamación, además de dormir colocando una almohada debajo de las rodillas si lo haces boca arriba o entre las piernas si duermes de lado.

 

Eso sí es muy importante no abusar del reposo en cama para prevenir la rigidez articular y debilidad muscular, señalan los especialistas. Intenta reincorporarte a tus actividades poco a poco de acuerdo a la intensidad de tu dolor.

Mujer con dolor en el cuello por hernia discal cervical

Foto: iStock

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¿Se pueden prevenir las hernias discales?

No siempre es posible, sin embargo, mantener un peso saludable, tener una buena postura, hacer ejercicio, así como estirar y fortalecer los músculos, pueden ayudar a reducir tu riesgo de presentarlas.

 

Dado que el exceso de peso es un factor de riesgo para las hernias de disco, mantener un peso saludable es una forma de prevención, además de reducir tu riesgo de otras enfermedades, como las cardiovasculares o diabetes tipo 2.

 

De igual modo, se recomienda seguir técnicas de levantamiento adecuadas si cargas cosas pesadas e incluso el uso de un cinturón de espalda para brindar soporte a tu columna, siempre y cuando tu médico lo recomiende, pues su uso excesivo puede debilitar los músculos que soportan la columna.

 

En cuanto al ejercicio, además de aquellos de tipo cardiovascular, es importante incluir en tu rutina algunos de fortalecimiento y estiramiento específico de abdomen, gúteos y espalda para estabilizar la columna vertebral y disminuir las tensiones de los discos.

 

Sin duda, las molestias por pasar mucho tiempo sentado pueden ser comunes, pero si éstas aumentan o la intensidad del dolor es alta, constante y se acompaña de adormecimiento, hormigueo u otros síntomas, es importante no dejarla pasar y acudir al médico para tratar la hernia discal u otro padecimiento que provoque tu malestar.

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