Hipertensión en México: un padecimiento prevalente en jóvenes. Cambiar la visión, clave para su tratamiento, especialistas

La hipertensión es un trastorno que afecta a millones de personas en el mundo y México no es la excepción, pues existe una alta prevalencia de esta enfermedad. En el marco del Día Mundial del Corazón, especialistas en cardiología, hablaron en conferencia sobre este problema, los factores que influyen en su desarrollo y la importancia de cambiar el cómo lo vemos para poder enfrentarlo.

De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud, la hipertensión o tensión arterial alta, es un trastorno donde los vasos sanguíneos tienen una tensión persistentemente alta, lo que puede dañarlos. Tomando en cuenta que la tensión arterial es la fuerza que ejerce la sangre contra las paredes de los vasos al ser bombeada por el corazón, cuanto más alta, más esfuerzo tiene que realizar este órgano.

En conferencia por el Día Mundial del Corazón, especialistas en cardiología señalaron que las enfermedades no transmisibles han aumentado a lo largo de los años. En ese sentido, en México ha habido un crecimiento exponencial en las enfermedades crónico degenerativas.

Esto a causa del envejecimiento y una mayor esperanza de vida de la población, pero también de la alimentación y estilo de vida, donde se han incorporado alimentos industrializados, comidas rápidas, además de haber un mayor nivel de sedentarismo y malos hábitos de sueño.

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Hipertensión en México, un problema no sólo de mayores

De acuerdo a la Dra. Nydia Ávila Vanzzini, médico especialista en cardiología del Instituto Nacional de Cardiología, en México el aumento de la hipertensión tiene una relación con la pirámide poblacional, pues este padecimiento es más prevalente en jóvenes, teniendo una gran presencia entre los 20 y 54 años.

La Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2016, reveló que 1 de cada 4 mexicanos mayores de 20 años vive con esta enfermedad, lo que puede causar daños irreversibles en el mediano y largo plazo, además de repercutir en las finanzas públicas, no sólo por el costo del tratamiento que puede implicar hasta un 2% del PIB de muchos países, sino por las complicaciones e incapacidades que conlleva.

Esto ha convertido a las enfermedades crónicas en una emergencia pública que obliga no sólo a enfocarnos en su tratamiento, sino contribuir al control de los orígenes y prevención. En ese sentido, es muy importante reconocer la influencia del sobrepeso y la obesidad, pues son parte esencial de este problema; la Dra. Ávila VAnzzini, subraya que muchas personas dentro de este grupo desarrollan hipertensión y posterior diabetes, lo cual puede dar lugar a complicaciones como infartos a nivel cardíaco o cerebral.

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Cambiar cómo se ven estas enfermedades para entenderlas y tratarlas

El Dr. Luis Antonio Alcocer Díaz Barreiro, Director General del Instituto Mexicano de Salud Cardiovascular, explicó que no se deben ver la diabetes, hipertensión y colesterol, como independientes, pues son parte de un todo. Y si se quieren obtener los resultados correctos se deben controlar la presión, colesterol, glicemia (azúcar en sangre) y peso el resto de la vida.

Asimismo, es importante entender que el tratamiento no se basa sólo en tratar los síntomas para que no “molesten” a corto plazo, pues muchas veces pueden no existir, sino que se enfoca en aumentar el tiempo y calidad de vida, ya que si los niveles se mantienen altos y descontrolados por muchos años, se restan años a las personas.

De acuerdo al Dr. Alcocer Díaz Barreiro, la enfermedad cardiovascular pasa por 3 etapas. Primera: en la que nos consideramos sanos, pero estamos en riesgo; segunda: donde ya se está dañando el organismo, pero no molesta (hay daños a nivel de tus órganos, pero son asintomáticos). Y tercera: aparecen las manifestaciones clínicas, lo cual puede llevar a una muerte prematura, es decir, antes del tiempo que tendrías derecho a vivir, que en términos muy generales podría ponerse en 70 años.

Finalmente, se debe tener claro que la hipertensión no es ese momento en que te sube la presión, sino una condición progresiva para el resto de la vida, cuyo daño es paulatino, progresivo y silencioso.

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Cómo prevenir y enfrentar el problema de la hipertensión

De acuerdo al especialisa, debemos reconocer si tenemos un estado cardiovascular saludable, analizando si cumplimos con factores básicos como: niveles saludables de colesterol, presión y glucosa, no fumar, cintura menor a 90 cm, ejercicio mínimo de 30 minutos y una alimentación saludable, si falta al menos uno de éstos, debe ser atendido por el médico.

Y si padeces hipertensión, debes llevar a cabo modificaciones en tu estilo de vida de la mano de los medicamentos. De igual modo, es importante llevar un control de tu presión, tomada con un aparato correcto y certificado, de brazo. La forma correcta de hacerlo es realizar 3 tomas, esperando un minuto entre cada una; se desecha la primera y se saca un promedio con las otras dos.

Eso sí, debemos entender que esto no sirve para tomar decisiones, es decir, una presión “normal” no implica que puedas omitir tu medicamento o reducir la dosis.

Cuidar la salud de nuestro corazón y cuerpo en general, es fundamental, y la pandemia del Covid-19 vino a ponerlo en perspectiva, pues tal como señalan los especialistas, mantener una buena salud puede ayudar a evitar complicaciones graves. ¿Cuándo fue la última vez que revisaste tu presión, colesterol o azúcar? No lo dejes pasar.