¿Fastidiar daña igual que la infidelidad?

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Fastidiar se denomina a la acción donde una persona repetidamente hace una demanda o pide algo, el otro la ignora y ambas partes incrementan su frustración/ Fuente: Photos.com
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POR: Salud180.com

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14-02-2014

Mantener  una relación de pareja, en cualquier etapa de la vida, no es una cuestión sencilla. Existen diferentes acciones que se realizan que pueden perjudicar  este núcleo afectivo: infidelidad y fastidiar, este último con efectos tan destructivos como el primero.

 

En el Wall Street Journal se publicó una nota que da énfasis a esta situación.  A través de una pequeña anécdota se relata cómo determinados actos pueden ocasionar un fastidio para la pareja. 

 

Una mujer  coloca en el sándwich de su marido un mensaje donde le informa que debe ir a recoger un artículo  para el hogar, situación que se la ha recordado ya 30 veces.

 

Fastidiar se denomina a la acción donde una persona repetidamente hace una demanda o pide algo, el otro la ignora y ambas partes incrementan su frustración. No es un detalle menor, este tipo de dinámica en la comunicación es potencialmente dañina y tan peligrosa como el adulterio o finanzas mal manejadas.

 

Las personas se quejan y fastidian al otro porque sienten que no son escuchados. Para los hombres esta situación genera una sensación de ser como niños regañados, por consiguiente se sientes impotente y molesto en ese papel.

 

Fastidiar puede terminar en divorcio, y casi siempre es así. El especialista, Howard Markman, psicólogo de la Universidad de Denver y especialista en el tema, opinó en el diario que todas las parejas sufren de esta dinámica, pero que sólo las que aprenden a reducir este tipo de conductas incrementan su probabilidad de seguir juntos y mantener al amor cercas. Las parejas que no aprenden, usualmente se dejan de amar y se separan.
  ¿Qué puedes hacer para que te escuchen? 

 

1. Intenta cambiar el modo de hacer el pedido. Escribe notas pequeñas con un vocabulario positivo, como: “Voy tardísimo al trabajo. Podrías recoger la leche en el súper, amor.

 

2. Utiliza más el “yo” que el “tú”. Por ejemplo: “Realmente necesito que pagues la tarjeta”, en lugar de “Nunca pagas la tarjeta y estoy harta”.

 

3.Baja tus expectativas. ¿En verdad es absolutamente necesario que se laven los platos después de la cena en domingo?

4.Pon un marco de fecha. Ejemplo: “¿Crees que puedas recoger el paquete esta semana?”

5. Busca alternativas. Si pagarle a una persona para que ayude en los labores del hogar les evitará un posible divorcio, tal vez es buen momento de invertir en su relación a futuro.

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