Aprende a germinar y cultivar maíz en una maceta (los elotes con mayonesa no faltarán jamás)
Por: Diana Oliva
Por: Diana Oliva
Para valorar y disfrutar de todas las bondades del maíz, ¡no es necesario vivir en México! Solo es suficiente que tengas una maceta y un espacio con luz en casa.
Además de ser delicioso (en esquites, ensaladas, sopas o tortillas), el maíz es rico en fibra, por lo que favorece la digestión. Por otra parte, y de acuerdo a información del Instituto Médico Mayo Clinic, este alimento cuenta con vitamina B, zinc, magnesio, cobre, hierro y zeaxantina.
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Aunque su sabor y propiedades pueden variar. ¿La razón? Hay diferentes variantes del maíz, existe de color rojo, naranja, azul, blanco, crema, rosa, morado, marrón y negro. Elige el de tu preferencia.
En una servilleta coloca de cuatro a 10 granos de maíz y envuelve. Una vez que lo tengas, coloca en un recipiente de plástico con tapa. Una vez que lo acomodes, humedece el papel con agua y tapa. Deposita en un espacio húmedo y cálido.
Deberás abrir a diario para asegurarte de que tenga agua. En siete a 15 días verás que ya los granos tienen raíz y hojas.
Escoge una maceta de aproximadamente 30 centímetros. Llena con sustrato que retenga la humedad (perlita, tierra y humus de lombriz).
En la tierra realiza cinco agujeros, te puedes apoyar con una cuchara o palita. En éste introduce una de las plantas que germinaron. Ahora, cubre con tierras, ¡no apriete!
Una vez que tengas todos los germinados en la maceta, riega con abundante agua y coloca en un lugar cálido. ¡Ojo! El maíz suele ser susceptible al frío.
A partir de ahora no dejarás de disfrutar de todos los productos derivados del maíz. ¡Disfruta!
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