Hormonas que causan los antojos nocturnos y aumento de peso

Por: Karla Muñoz Huitzil

Es casi media noche y el antojo por un pan comienza a invadir tu mente, pareciera que esos antojos nocturnos son cada vez más frecuentes, ¡te decimos cuáles son las cuatro hormonas que causan los antojos nocturnos!

 

De acuerdo a un estudio de investigación realizado por Susan Carnell, profesora de Psiquiatría y Ciencias del Comportamiento en la Escuela de Medicina de la Universidad John Hopkins a 32 hombres y mujeres con obesidad donde encontraron que las hormonas que brindan saciedad están más presentes en la tarde y en la noche son más susceptibles para activar el apetito.

 

Hormonas culpables de los antojos nocturnos y del aumento de peso/ cortesía iStock

 

 

Las cuatro hormonas que causan antojos y aumento de peso

 

Ghrelina: es la hormona que genera hambre pues da niveles reducidos de saciedad. Esta hormona estimula el cerebro para provocar aumento del apetito y también ocasiona acumulación de grasa abdominal. De acuerdo a una investigación Metabólica de la Clínica Universidad de Navarra esta hormona es producida por el estómago y su función es estimular el hipotálamo y generar apetito.

 

Leptina: es la hormona proteica que se libera en el tejido adiposo y está asociada a obesidad y diabetes, pues controlar la leptina es una forma de mantener el peso corporal bajo control. Esta hormona influye en la ingesta y el gasto energético.

 

Insulina: es una hormona que regula la absorción del azúcar de las células. De acuerdo a Clínica Mayo, la insulina y el aumento de peso van de la mano, pues cuando ingieres más calorías de las que necesitas, las células recibirán más glucosa de la que necesitan y cuando no se usa, se acumula en forma de grasa.

 

Péptido YY: es una hormona intestinal que regula la cantidad de calorías ingeridas y a la composición de los alimentos. La concentración de péptido es baja cuando el cuerpo está en y uno pero se eleva después de la ingesta de alimentos. El péptido YY reduce el apetito después de comer, aproximadamente dos horas después.

 

Estas hormonas aseguran responden a los patrones de alimentación, por ello, la mejor forma de ayudar a su funcionamiento es con un cambio de hábitos alimenticios más sanos. Por ejemplo comer bien durante el día para evitar que comer en exceso en la noche.

 

*Este contenido original se publicó en 2018, pero sigue siendo relevante al tratarse de temas en pro de tu salud.