Tu cuerpo al límite con clases de tubo

Más que ser una práctica relacionada con el baile erótico y coreográfico en tubo, es un reto de exigencia al cuerpo. Su fundadora e instructora, Jezabel Olmos, es la responsable desde hace más de 3 años de las clases que llevan a mujeres a practicar este divertido (pero no por ello fácil) acondicionamiento físico, con el accesorio que lo hace tan popular: el tubo.

Jezabel cuenta con certificaciones como Instructora de Pole Fitness (o popularmente conocido como clases de tubo) en Londres y Las Vegas, entre muchas otras ciudades donde se ha preparado, que la hacen actualmente la única mexicana con dos certificaciones internacionales. La experta comenta para salud180.com, que la intención de la alta preparación en el instructor es logar que los alumnos puedan realizar el mismo giro, sin importar su grado de acondicionamiento físico o sus constitución sin resultar lastimados, ya que este tipo de actividades conllevan cierto grado de dificultades y riesgos.

“Esta práctica esta diseñado para todo tipo de personas. Aquí asisten mujeres ejecutivas, estudiantes, escritoras, doctoras, ingenieras, etc.” indica Olmos, “El grupo de edad va desde los 25 a los 55 años en promedio”

Hace algunos años Jezabel intentó buscar clases profesionales de fitness en tubo, pero no existía nada en México. Es por ello que buscó la preparación fuera del país y regresó para crear un servicio profesional y de alta calidad donde se proporcionaran lecciones seguras de ejercicio para mujeres.

Beneficios de la práctica en tubo

No admite más de ocho personas por clase y la audiencia que asiste regularmente es motivada porque es una actividad de acondicionamiento físico progresiva y efectiva, en la cual se perciben los avances de cada alumna gracias al grado de entrenamiento que cada una alcance. “Lo cual empuja a las mujeres a seguir motivadas y alcanzar metas que jamás previeron llegar a lograr” indica la fundadora del lugar.

Las clases de Pole Fitness también, son consideradas benéficas para la mente, ya que la autoestima se ve reforzada y se aprende con el tiempo a ser más extrovertida y segura de una misma.

El control sobre el cuerpo conforma una parte importante de las lecciones y del arte para dominar dicha práctica, ya que se aprende a controlar movimientos rápidos y coordinados y se intenta crear conciencia de diferentes partes del cuerpo.

Jezabel menciona que es no es una actividad que se enfoque en desarrollar la sensualidad ni el erotismo de la mujer, aunque entra en el contexto como resultado, sino es una práctica hecha para la satisfacción personal, donde el objetivo es llevar el cuerpo al límite.

No se puede hablar de una cantidad definida de calorías perdidas por clase, ya que el resultado depende de las características de cada persona, su complexión corporal y el esfuerzo involucrado de cada una, pero si se puede afirmar que genera musculatura más que definirse como una clase cardiovascular.