Falta de deseo es común en mujeres mexicanas

Se le conoce también como trastorno del deseo sexual hipoactivo. Es una disfunción muy frecuente y se caracteriza por una deficiencia o ausencia de fantasías sexuales y de deseo de mantener contactos íntimos. Para el doctor David Barrios Martínez, sexólogo clínico y psicoterapeuta de la asociación Caleidoscopía, se trata de “una de las tres disfunciones de la vida erótica más comunes entre las mujeres mexicanas”.

Se estima que 80% de las mujeres que solicita ayuda acude debido a la falta de apetito sexual y de ausencia de receptividad. De acuerdo con el doctor Eusebio Rubio, uno de los expertos más reconocidos y fundador de la Asociación Mexicana para la Salud Sexual (AMSSAC), estas disfunciones no son enfermedades sino síndromes: “un conjunto de síntomas que se presentan con independencia de su causa y que se manifiestan de manera recurrente, persistente y causan malestar en quien los padece”.

Factores que generan el trastorno del deseo sexual hipoactivo

Según los especialistas, la mayoría de los casos tiene que ver con problemas de comunicación, falta de afecto, pugnas y conflictos de poder y por falta de tiempo para que la pareja pueda estar a solas.

Por otra parte, el deseo sexual inhibido también suele ocurrir en personas que han tenido:

• una educación sexual muy estricta durante la crianza (lo que llega a provocar una auto-negación del derecho al placer)
• actitudes negativas hacia el sexo (relacionándolo a lo malo o pecaminoso)
• experiencias sexuales traumáticas (como violación, incesto o abuso sexual)

En ocasiones, algunas enfermedades como la diabetes mellitus, hipertensión arterial, o bajos niveles hormonales pueden generar esta disfunción, al igual que el uso de ciertos fármacos como tranquilizantes y antidepresivos, en particular, aquellos que producen insomnio, fatiga, dolor o sensación general de malestar.

Las afecciones psicológicas, como la depresión y el estrés excesivo, influyen también en la disminución del interés sexual. Los cambios hormonales afectan la libido. La apatía sexual puede estar asociada con otros problemas sexuales y, en ocasiones, provocada por éstos. Por ejemplo, cuando hay una condición de anorgasmia o de dolor en las relaciones sexuales, la mujer suele perder interés en el sexo porque lo asocia con el fracaso o no le sienta bien.