Alcanza el clímax con la reflexología sexual

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Abrazar. Abraza a tu pareja en una posición en la que estén cara a cara, manteniendo la mayor parte de sus cuerpos en contacto. Si la mujer es notablemente más liviana o más débil, debe permanecer encima. En los demás casos, no importa quién esté encima. Recuerda que se deben mirar profundamente a los ojos. El contacto ocular es fundamental, ya que trasmite amor y energía sexual/ Fuente: Photos.com
Salud180, El estilo de vida saludable

POR: Diana Oliva

Estudió periodismo en la FCPyS. Es aficionada a la literatura clásica y su mayor pasión son los perros.

01-07-2013

Dentro del acto íntimo de pareja, las caricias, besos y gemidos poseen un papel central en lo que a estimular los sentidos se refiere; pero al margen, la reflexología sexual podría ofrecerte otra forma de logar la excitación, y alcanzar así la meta anhela: el orgasmo.

 

Esta técnica parte de una práctica tradicional China, la cual ofrece sanación a través de la aplicación de presión en puntos estratégicos del pie. Sin embargo, en la reflexología sexual se lleva a otras zonas del cuerpo; ejemplo, los genitales, en donde se canaliza la energía sexual con el fin de que la pareja, y de forma individual, alcancen la plenitud del placer y el equilibrio emocional.

 

De acuerdo con Tao Mantak Chia, taoísta creador del  Sistema del Tao Universal y autor del libro “El hombre multiorgásmico”, existen cuatro ejercicios que te permitirán alcanzar el clímax a través de  un intercambio de energía sexual:

 

1. Expandir. Cuanto más lubricada está una mujer, más energía yin tiene. Puedes beber su yin directamente durante el sexo oral o a través de los  pezones. La expansión será más fácil si tú (y, en el caso ideal, también tu compañera) aspiran la energía hacia arriba y la hacen circular por su cuerpo.

 

2. Abrazar.  Abraza a tu pareja en una posición en la que estén cara a cara, manteniendo la mayor parte de sus cuerpos en contacto. Si la mujer es notablemente más liviana o más débil, debe permanecer encima. En los demás casos, no importa quién esté encima. Recuerda que se deben mirar es profundamente a los ojos. El contacto oculares fundamental, ya que trasmite amor y energía sexual.

 

3. Respirar. La coordinación de la respiración es esencial para intercambiar chi. Ahora que has dejado de hacer movimientos de penetración o de giro y tienes abrazada a tu pareja, sitúa la nariz cerca de la oreja de tu amante y tu oreja cerca de su nariz. Esto hará que cada uno de vosotros pueda oír la respiración del otro. Entonces, sincronicen ambas respiraciones: así  podrán inspirar y espirar su energía.

 

4. Circular. Para armonizar, tanto tú como tu pareja deben ser capaces de activar su propia órbita microcósmica como primer paso para equilibrar el canal posterior, que asciende a lo largo de la columna y es más yang, con el canal anterior que baja por la línea media del cuerpo y es más yin. Recuerda que debes aspirar la energía hacia arriba contrayendo los músculos del ano y/o utilizando lamente, y después debes guiarla hacia la parte delantera del cuerpo a través de la lengua.

 

Para Tao Mantak, cuando se aprende a dominar la energía sexual se posee una fuente alternativa e inagotable de placer. ¡Inténtalo y disfruta de tu sexualidad a lado de tu pareja!

 

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