5 tips para un autoerotismo compartido

La piel, los órganos sexuales, el olor e, incluso el sabor, forman parte del erotismo que rodea al cuerpo humano y al encuentro íntimo. Sin embargo, la gran mayoría desconoce cómo estos elementos interactúan sobre sí mismos y su compañero; para descubrirlo el autoerotismo en pareja es clave para ello.

De acuerdo con el sexólogo Andrés Flores, el autoerotismo es una fuente de autoconocimiento y descubrimientos de las posibilidades eróticas que pueden enriquecer tu vida sexual. Su importancia viene dada porque sirve como fuente de goce y estimulo placentero de forma personal o en pareja.

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5 estrategias para que sus cuerpos se reconozcan

El autoerotismo en pareja les permitirá mostrar en un lenguaje no verbal y muy físico sobre cómo les interesa ser estimulados. Por ello Salud180.com, con información de la comunicóloga y experta en sexualidad, Elsy Reyes, te presenta cinco técnicas para un autoerotismo en pareja:

1. ¡Da un pequeño empujón! A veces, para una mujer puede resultar intimidante acariciarse frente a su pareja. Así que comienza por acariciarla tú muy lentamente, mientras la besas. Después lleva su mano sobre su zona genitas, empieza el movimiento. No dejes de ayudarla, cuando ella lo empiece a ser sola suelta su mano, pero no pierdas el contacto con su cuerpo.

2. Frotamiento genital mutuo. Acostados uno sobre el otro -no importa quién encima de quién-, deslicen sus cuerpos mientras permiten que sus genitales se rocen. El hombre puede estimular el clítoris a través de la punta de su pene e ir bajando para tocar también la entrada de su vagina.

3. La silla humana. Tu pareja debe sentarse sobre la cama recargando la espalda en la cabecera. Posteriormente, coloca tu cuerpo sobre el de él, ambas pelvis deben estar alineadas y sus piernas estiradas de tal modo que el pene quede libre frente a la vagina. Desde ahí manipula su miembro al tiempo que él, con movimientos lentos, estimula tu clítoris.

4. Técnica de los ocho.  Dibuja esta forma con tus dedos y cada ocho veces, cambia el sentido y repite. De preferencia, realízala cuando te encuentres explorando la vagina de tu compañera.

5. No siempre hay que llegar a la meta. En vez de “jalar” tu pene con fuerza hasta lograr el orgasmo, prueba pidiéndole a tu compañera que inicie apenas rozando tu pene de abajo hacia arriba y en espiral; frotando el glande con el dedo pulgar en círculos y vaya intensificando.

Las caricias y los besos no sólo son esenciales en el autoerotismo, sino en todo encuentro amoroso. No por haber llegado al clímax es necesario que sus cuerpos se alejen. No pierdas el contacto, disfruta de tu sexualidad al máximo.