Reir te ayuda en el tratamiento de enfermedades

Reír no es sólo “manifestar regocijo mediante determinados movimientos del rostro, acompañados frecuentemente por sacudidas del cuerpo y emisión de peculiares sonidos inarticulados”, como lo señala el diccionario de la Real Academia de la Lengua Española. Es, ante todo, una actividad fisiológica que afecta a todo nuestro organismo.

Para el médico francés Pierre Vachet, uno de los estudiosos más reconocidos de la risoterapia, tan divertida actividad aporta una variedad de beneficios: aumenta la capacidad respiratoria, expande los vasos sanguíneos, eleva el aporte de sangre a los tejidos, incrementa la secreción hormonal, acelera la reparación de los tejidos y estabiliza las funciones del organismo.

Por su parte, el filósofo André Moreau, promotor de una corriente de pensamiento llamada “jovialismo”, ha señalado la importancia de saber desencadenar el sentido del humor y las energías positivas en el ser humano y propone la práctica de la risa para expresar la vitalidad y creatividad humanas.

¿Por qué es bueno reírse?

Quienes tengan las manos y los pies fríos deberían intentar reír más a menudo, en vez de colocarse guantes y muchos calcetines. Reír da calor interno. Como envía más oxígeno a los tejidos, también acelera la curación de enfermedades y estabiliza las funciones de nuestro organismo, fortaleciéndolo contra infecciones y padecimientos degenerativos, aumentando el apetito y protegiendo contra las enfermedades del corazón. Además, limpia nuestro organismo de productos como el colesterol y repercute sobre el sistema hormonal, estimulando la producción de endorfinas en el cerebro.

Entre más rías, menos enfermedades padeces

Algunos médicos han observado que las personas que ríen mucho tienen una tendencia mucho menor a padecer trastornos del aparato digestivo (como la úlcera gastroduodenal) que a las personas que lo hacen poco. Algunos han llamado al ejercicio de reír el “footing a pie quieto”, ya que pone a todos los sistemas internos en movimiento. Por el contrario, el miedo, la tensión y la ansiedad tienden a agarrotar el cuerpo y a disminuir sus capacidades.

Reír también aclara la mente: cuando nos reímos de un problema estamos paliando las preocupaciones, con lo cual nos es más fácil encontrar una solución. Tantas ventajas no han pasado desapercibidas para nadie. Incluso organizaciones como Médicos sin Fronteras y Payasos sin Fronteras han hecho de la risa una forma de trabajar con personas que han perdido la sonrisa. La utilizan como terapia para superar otro tipo de problemas, bien de carácter psicológico o de otra naturaleza.