¿Sueles regañar a tu pareja?

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Los problemas en la comunicación son una de las principales razones que conducen al fracaso de un matrimonio, por encima incluso de la infidelidad. Y el nagging es exactamente el tipo de comunicación tóxica que puede llegar a destruir una relación de pareja.
Salud180, El estilo de vida saludable

POR: J. Manuel Reyes

Editor de Salud180.com Aficionado a las nuevas ideas. Una palabra lo cambia todo.

06-02-2013

Los problemas en la comunicación son una de las principales razones que conducen al fracaso de un matrimonio, por encima incluso de la infidelidad. Y el nagging es exactamente el tipo de comunicación tóxica que puede llegar a destruir una relación de pareja.

 

La interacción en la que una persona repetidamente hace una solicitud y la otra persona lo ignora repetidamente, por lo cual suele existir un regaño o reclamo, es un problema que enfrenta en algún momento una relación de pareja. A esto se le conoce actualmente como nagging.

 

El término nagging, que se puede traducir como una mezcla de "regañar", "fastidiar", "insistir" y "gruñir", siempre conlleva un matiz negativo, mientras que la insistencia termina devorando la cordialidad de la relación de pareja.

 

Los naggers no dialogan, sino que ordenan y regañan, a veces con aires de superioridad, además de que critican sin parar y tienden a generalizar, lo cual no sólo daña la buena comunicación en la relación de pareja, sino que mina la confianza y autoestima de la persona que recibe el regaño.

 

“La sensación que tiene el regañado es que todo hace mal y  que su pareja se comporta como lo habría hecho su padre. Es decir, uno manda, el otro obedece dentro de una relación de pareja”, señala el psicoanalista Edward S. Dean.

 

Este proceso suele ser producto de una situación en la que participa gente característica, mientras el que regaña suele ser recto, pero también débil, inseguro y temeroso, el regañado suele aceptar su culpa y mostrar mucho autocontrol.
 

 

Scott Wetzler, psicólogo y vicepresidente del Departamento de Psiquiatría y Comportamiento Ciencias en el Montefiore Medical Center de Nueva York, explica que “regañar a la pareja sucede cuando tenemos la impresión de que no vamos a conseguir lo que queremos de dicha persona, así que sentimos que tenemos que reclamarle para conseguirlo".

 

De esta manera se forma un círculo vicioso, en el que ni la persona que regaña, ni la persona que hace caso omiso, ponen un alto ni corrigen la problemática. Al grado tal que ya ni saben por qué regañan o son regañados.

 

"Regañar es un enemigo del amor, si se permite que persista esta conducta", así lo determina Howard Markman, profesor de psicología en la Universidad de Denver, en su estudio publicado en el Journal of Family Psychology, la única salida para la relación de pareja es aprender la comunicación positiva o, en su defecto, la separación definitiva.

 

Si quieres conocer más sobre éste y otros conflictos que enfrentan las relaciones de parejas contemporáneas, no te pierdas de lunes a viernes la nueva teleserie de Cadena Tres: Dulce Amargo. ¿Cuándo el amor ya no es suficiente?

 

 

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