Preparación mental para ejercitarse

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Tener claras tus metas, así como el propósito por el cual has decidido ejercitarte, es poder en sí mismo. La preparación mental es el complemento a un adecuado programa de entrenamiento o preparación física. Fuente: Photos.com
J. Manuel Reyes

POR: J. Manuel Reyes

Editor de Salud180.com Aficionado a las nuevas ideas. Una palabra lo cambia todo.

11-03-2013

La falta de objetivos o claridad para ejercitarse puede reducir considerablemente tu rendimiento y resultados, lo cual, a la postre, puede traducirse en la deserción, poca motivación, lesiones y fatiga.

 

Tener claras tus metas, así como el propósito por el cual has decidido ejercitarte, es poder en sí mismo. La preparación mental es el complemento a un adecuado programa de entrenamiento o preparación física.

 

Por lo tanto, de acuerdo con guiafitness.com,  para una buena preparación mental se recomienda:
 

 

1. Confianza en uno mismo. Es muy diferente salir con una actitud positiva y de confianza en uno mismo de que se puede conseguir alguna marca o meta, que va a salir bien y de hacerlo lo mejor posible, los resultados saltarán a la vista.
 

 

2. Concentración. Existe un momento previo de la preparación en la que nos hemos de activar y preparar para la acción, a partir de ese punto la activación de cada acción estará encaminada para que podamos empezar a tope de concentración y motivación.
 

 

3. Visualización. Antes de salir a ejercitarte, debes tener una imagen clara y concisa de lo que quieres hacer, cómo ejecutarlo y visualizar lo que el entrenamiento hará por ti, de esta manera tendrás 100% de motivación.
 

 

4. Relajación. Las tensiones son buenas hasta cierto punto, lo cierto es que antes de activarte debes dedicar algunos minutos a relajarte, con la finalidad de tener una mejor concentración, enfoque y activación.
 

 

5. Motivación. Buscar estímulos para ejercitarse hace que una persona o deportista encuentre grato su entrenamiento, lo cual a su vez le permite enfocarse y rendir al máximo.

 

Recuerda que cuanto más detallada y clara sea la preparación mental, teniendo en cuenta estos elementos, mejores serán los resultados y más fácil será comunicarle estos pensamientos a nuestro cuerpo, con la finalidad de comenzar a construir un hábito saludable para ejercitarse.

 

Considera que luego de cada entrenamiento es fundamental la recuperación, tanto física como mental, para lo cual se aconseja recostarse unos minutos, visualizar cada uno de tus músculos relajándose, respirar de manera profunda pero rítmica, así como pensar en la manera en que la mente y cuerpo se han fortalecido.

 

 

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