Perros de rescate, una oportunidad de vida

Su presencia ofrece compañía, confort e influye en la creación y fortalecimiento de lazos afectivos. Sin embargo, su papel dentro de la existencia humana no sólo se limita al aspecto emocional, sino que también pueden ayudar a salvar vidas; ejemplo, los perros de rescate.

Tras la explosión efectuada en la Torre de Pemex, Policía Federal, Ejército y cuerpos de salvamento emplearon alrededor de 50 perros para la búsqueda y rescate de víctimas enterradas entre los escombros que dejó el siniestro.

La imagen de este grupo canino no es nueva en el país, pues tras el terremoto de 1985, que devastaría al Distrito Federal, los perros de rescate se convirtieron en elementos esenciales para salvar vidas.

Por ello, 1987 estudiantes de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la UNAM crearon el primer grupo canino de búsqueda y Rescate de México. Actualmente, éste se encuentra incorporado  a la Unidad de Intervención de la Dirección de Protección Civil, dependiente de la Dirección General de Servicios Generales.

Los perros que son entrenados para este tipo de trabajo deben poseer ciertas características:

- excelente olfato
- carácter tranquilo
- motivación por el juego
- sociabilidad
- son más utilizados los perros de talla media y de raza de protección y de pastoreo

Entre el guía y perro debe existir una relación muy fuete de amistad, pues de este vínculo depende el éxito de la pareja para localizar y salvar la vida de una persona.

Un perro, a diferencia de una máquina, puede detectar la presencia de un cuerpo de 5 a 8 metros bajo la superficie.

Su campo de acción es muy extenso: catástrofes naturales, terremotos y huracanes,  y hasta desastres provocados por la mano del hombre como explosiones.

Actualmente los perros de búsqueda y rescate se pueden clasificar en dos grupos: de rastreo y venteo. El primero, como su nombre lo indica, siguen el rastro de una persona desde un punto A hasta un punto B. Estos necesitan un objeto o lugar de partida.

En el caso de los de veteo, buscan el olor humano que se encuentra en el aire. Este tipo de perro es el más empleado para buscar víctimas en derrumbes, avalanchas o cadáveres de personas ahogadas.

Los perros de rescate son una herramienta muy útil para los seres humanos, por lo que debemos fomentar el adiestramiento, con el fin de evitar  tragedias por falta de equipos de rescate humanos. Es la mejor y más valiosa ayuda que el mejor amigo del hombre puede ofrecer.

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