Epilepsia afecta a 2 millones de personas en México

Al menos 2% de las personas a nivel mundial viven con epilepsia y se sabe que en México, alrededor de 2 millones de individuos sufren esta enfermedad, afirmó el  neurólogo Sergio Córdova, médico del Servicio de Neurología del Hospital Español de México.

Córdova, precisó que la epilepsia es un grupo de numerosos trastornos y/o enfermedades cerebrales, que se caracterizan por la presencia recurrente de crisis o ataques epilépticos.

De acuerdo con el neurólogo del Hospital Español en México, existen 3 factores que pueden desencadenar esta enfermedad:

1. Lesiones cerebrales al nacimiento: “Es decir, cuando existen partos peligrosos o cesarias en las que se lastimó al bebé con alguna pinza, etc.”

2. Cisticercosis Cerebral. "Es la presencia de larvas de Taenia solium, comúnmente conocida como solitaria, en el sistema nervioso central y que afecta al cerebro humano"

3. Lesiones por traumatismo cráneo encefálico.

La epilepsia no es hereditaria, ni contagiosa y se puede presentar a cualquier edad. Da por igual a hombres y mujeres: “Se origina por alguna afectación cerebral o por ciertas alteraciones genéticas”, afirmó Córdova.

Episodios epilépticos

Algunas de las características de la epilepsia, son:

1. Sacudidas involuntarias

2. Alteraciones en los sentidos

3. Ritmo cardiaco acelerado

4. Incontinencia

5. Sensaciones de irrealidad

6. Espuma en la boca

7. Imágenes o sonidos distorsionados

El neurólogo Córdova, sostuvo que lo ideal es que ante la alerta de alguno de estos síntomas, se acuda al médico, quien debe confirmar o eliminar el diagnóstico: “Se debe conocer el historial clínico del paciente, realizar pruebas de sangre y practicar un electroencefalograma, una tomografía y/o resonancia magnética”.

El ex titular de la Clínica de Epilepsia del Instituto Nacional de Neurología y Neurovirugía, te recuerda que este 26 de marzo se celebra el Día Mundial de la Epilepsia, con el propósito de que la gente tome conciencia sobre esta enfermedad y se elimine el estigma o rechazo social al que se ven sometidos las personas que viven con epilepsia.