¿Bolsas en los ojos?, que tu mirada no se marchite

Los seres humanos nos encontramos en una lucha constante contra los signos de la edad. Entre los más recurrentes,  para hombres y mujeres, se hallan las bolsas en los ojos. Mismas que revelan muchas veces nuestra edad, cansancio o malos hábitos alimenticios. 

El área alrededor de los ojos es frágil y delicada, sin embargo, esto no son los únicos factores que originan este problema. Existen tres tipos de bolsas en los ojos, y antes de iniciar un tratamiento debes identificar cuál es la que padeces.

1. Bolsas acuosas. El contenido del saco se debe a una mala circulación linfática en el parpado que lo llena de líquido. Los principales motivos que la originan son: mal hábitos para dormir, insuficiente o una mala posición, consumo crónico de bebidas o mal funcionamiento renal.

2. Bolsas  grasas. Aquí se da una pequeña acumulación de grasa en el tejido de la parte inferior del ojo. Su causa es la vejez, misma que debilita las capas y músculo que integran esta zona.

3. Bolsas genéticas. Son hereditarias, y de las tres son las más difíciles de corregir, pero aun así se pueden disminuir o atenuar

Una vez que tienes ubicada la causa que origina este problema puedes iniciar un tratamiento, mismo que se divide en dos clases: médico y natural. 

Cifras de la Asociación Mexicana de Cirugía Plástica, Estéticas y Reconstructiva (AMCPER) señala que México tiene el segundo lugar en el mundo en práctica de cirugía estética.

Para las bolsas en los ojos puedes recurrir a la blefaroplastía, que consiste en el retiro de este cúmulo de grasa.  También puedes apoyarte en otros procedimientos: laserterapia y drenaje linfático por medio de un masaje que active la circulación y cremas; estas últimas deben estar enfocadas al cuidado de esta zona.

Éstas no son las únicas alternativas, si la cirugía no es lo tuyo también existen remedios naturales que han demostrado su eficacia en la disminución de las bolsas en los ojos.

1. Paños con extracto de hamamelis. Esta planta es conocida con el nombre de avellano de bruja. Su principal propiedad es que es un gran astringente, lo que ayuda a la estimulación circulatoria de la piel.

2.  Lava tu cara con agua fría. Esta ayudará a la desinflamación y a reactivar la circulación.

3. Buenos hábitos para dormir. Trata de emplear una almohada que te permita elevar tu cabeza por encima de tu pecho, esto evitará la acumulación de líquidos.

4. Alimentos sanos. Integra a tu dieta mayor cantidad de verduras, esto no sólo beneficiará el aspecto de tu piel también disminuirá las bolsas en los ojos.

Existe una diferencia entre ojeras y bolsas en los ojos. La primera es una pigmentación que oscurece la piel de alrededor de los ojos; la  segunda se distingue por un abultamiento. No son lo mismo.

Recuerda, tu rostro no sólo puede reflejar tu edad sino también tus malos hábitos. Cuídate y prueba alguno de nuestros consejos. ¡Suerte!

Síguenos en @Salud180 y Salud180 en Facebook

¿Quieres recibir más información de tu interés? Regístrate con nosotros.