Qué es una fascitis necrosante

Todos hemos tenido alguna herida en la piel ocasionada por cortar mal algún alimento, al caernos y rasparnos o por otras circunstancias. Lo que nadie imagina, es que esas heridas puedan ocasionarnos una fascitis necrosante o la muerte.

Recientemente se conoció el caso de un niño de 11 años, Jesse Brown, que falleció luego de haber desarrollado una infección mortal ocasionada por una bacteria carnívora. El pequeño sufrió una lesión en la pierna, al usar una caminadora.

Días después, su madre se alarmó debido a que “toda su pierna estaba cubierta de manchas púrpura, roja, casi como moretones”. Al llevarlo al hospital, señalaron que el menor había desarrollado una infección por estreptococo del grupo A. Como no fue atendido de manera oportuna, la infección se convirtió en fascitis necrosante carnívora.

Qué es una fascitis necrosante

La fascitis necrosante, también conocida como "infección carnívora", es una infección grave y potencialmente mortal de la piel y los tejidos blandos subyacentes. Es causada por bacterias que invaden y destruyen el tejido afectado.

Existen diferentes tipos de bacterias que pueden “devorar” carne; aunque los estreptococos del grupo A, son los principales causantes de la fascitis necrosante, también conocida como gangrena de tejidos blandos o bacteria necrosante.

Los síntomas de la fascitis necrosante incluyen dolor intenso en el área afectada, fiebre, hinchazón, enrojecimiento y ampollas llenas de líquido. La piel también puede parecer tensa y brillante. A medida que la infección progresa, puede causar necrosis tisular, lo que significa que el tejido comienza a morir.

Se tiene registro de alrededor de 1200 casos por año, desde 2010, relacionados con la fascitis necrosante en Estados Unidos. Si la infección no se atiende de forma oportuna, podría haber sepsis o septicemia, menciona la National Organization for Rare Disorders.

De acuerdo a los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), 1 de cada 3 personas que adquieren esta infección, mueren.

Cómo se produce la fascitis necrotizante

Qué es una fascitis necrosante. Foto: iStock

La fascitis necrotizante se produce cuando las bacterias invaden los tejidos blandos del cuerpo, incluyendo músculos, piel, grasa y otros tejidos conectivos. Las bacterias suelen entrar en el cuerpo a través de una herida abierta, como una cortada, raspadura, quemadura o picadura de insecto.

Una vez que las bacterias ingresan al cuerpo, pueden liberar toxinas y enzimas que destruyen el tejido y causan una respuesta inflamatoria del sistema inmunológico. La infección puede propagarse rápidamente a través del tejido, lo que resulta en una degradación de los tejidos blandos afectados. A medida que la infección progresa, el tejido se vuelve oscuro y comienza a morir, lo que puede llevar a una gangrena.

Algunos factores que aumentan el riesgo de desarrollar fascitis necrosante incluyen tener un sistema inmunológico debilitado, enfermedades crónicas (diabetes, cáncer, cirrosis, enfermedad renal), heridas profundas o extensas, cirugías recientes, uso de drogas intravenosas y mala higiene personal. 

Es importante buscar atención médica inmediata si se sospecha de una fascitis necrosante, ya que el tratamiento temprano es esencial para prevenir complicaciones graves y potencialmente mortales.

Cuánto avanza la fascitis necrotizante

Qué es una fascitis necrosante. Foto: iStock

La fascitis necrotizante es una infección grave y potencialmente mortal que puede avanzar muy rápidamente, especialmente si no se trata de inmediato. La bacteria suele entrar al organismo por raspones, heridas quirúrgicas, heridas punzantes, quemaduras, picaduras de insecto o cortaduras.

El avance de la fascitis necrotizante puede variar dependiendo de la persona y la gravedad de la infección, pero en general la enfermedad puede progresar en cuestión de horas o días.

Los síntomas iniciales de la fascitis necrotizante pueden incluir dolor intenso en el área afectada, fiebre, hinchazón, enrojecimiento y ampollas llenas de líquido. A medida que la infección avanza, puede causar necrosis tisular, lo que significa que el tejido comienza a morir. Si no se trata, la infección puede propagarse rápidamente a través del tejido, lo que puede provocar la muerte del tejido y la gangrena.

Es importante tener en cuenta que la fascitis necrotizante no se transmite de persona a persona como un resfriado o una gripe. La infección generalmente se produce cuando las bacterias ingresan al cuerpo a través de una herida abierta o una lesión en la piel.

Desafortunadamente su diagnóstico puede ser complejo, debido a que muchos de los síntomas se relacionan con otras afecciones en etapa temprana. Para saber si se trata de fascitis necrotizante, se debe hacer un examen de la lesión, una biopsia del tejido o un análisis de sangre.

Es importante comenzar el tratamiento lo antes posible para que los antibióticos hagan efecto y el daño no afecte otras zonas del organismo. Hay que considerar que la fascitis necrosante se propaga con mucha velocidad, por lo que la atención oportuna es lo mejor. 

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En el caso de Jesse, la bacteria llegó a su cuerpo al lesionarse con la caminadora e infectó el torrente sanguíneo. “Dijeron que debido a que se torció el tobillo, probablemente ahí fue donde lo atacó la infección. Porque ya estaba débil”, señaló el primo de Jesse.

“Que esto lo matara en cuestión de días fue una locura. Si hubiera más conciencia, tal vez podríamos haberlo detectado antes cuando notamos que tenía fiebre”. La bacteria invadió su cerebro y ocasionó que éste se inflamara. Los médicos hicieron lo posible por salvarlo, pero eso no pudo suceder. 

Si pensabas que las heridas son cosa menor y no las atendías de forma correcta, piénsalo dos veces después de leer esto. Una herida mal atendida puede desencadenar fascitis necrosante y en los peores casos, la muerte.