¿Por qué vomito luego de hacer ejercicio?

Al entrenar y sudar la gota gorda en el gym esperas quemar grasa, tonificar tus músculos, bajar de peso y mejorar tu salud, pero ¿vomitar? Si al menos una vez has sido víctima de las náuseas y las ganas de vomitar tras hacer ejercicio, te conviene saber lo que hay detrás. Toma nota. 

 

 

Las ganas de vomitar luego de hacer ejercicio pueden ser causadas por distintas razones, pero por lo regular son estas:

 

  Calor elevado 

No como tal un golpe de calor, pero al hacer ejercicio tu temperatura corporal puede elevarse y causarte náuseas y ganas de vomitar. Para evitarlo, es importante que uses ropa que permita la ventilación de tu piel y tomes suficiente agua antes, durante y después de tu entrenamiento para darle la vuelta a la deshidratación y al calor elevado. 

 

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  Falta de nutrientes o baja de azúcar

Una dieta inadecuada puede provocar que tu cuerpo no reciba los nutrientes que necesita para mantenerse en buen estado. La mala alimentación puede causar mareos y ganas de vomitar tras ejercitarte, por ejemplo, si tus índices de glucosa son bajos.

 

 

Por ello, es importante que acudas con un nutriólogo para que te diseñe una dieta acorde a tus necesidades y evites entrenar con el estómago vacío, pues de lo contrario, hasta podrías desmayarte. 

 

 

Deshidratación 

Al entrenar, tu cuerpo suda y pierde agua, si no repones el líquido perdido tomando suficiente agua, puedes experimentar vómito al deshidratarte. Así que no olvides cargar tu botella de agua al activarte.

 

 

Nervio vago 

Puede ser que el nombre de nervio vago no te suene, pero su función es la de regular nuestra actividad cardíaca. Cuando hacemos ejercicio nuestro corazón se acelera y vuelve a su ritmo normal cuando pausamos o terminamos el entrenamiento.

 

 

Sin embargo, si al entrenar, el nervio vago se estimula de más, el corazón puede tener dificultad para bombear la sangre, provocando una baja presión arterial y vómito. La principal causa de esto es la falta de condición física y no saber controlar la intensidad del entrenamiento.

 

Pérdida de sodio 

Al entrenar y sudar perdemos una buena dosis de sodio y el exceso de agua también contribuye a su pérdida. Si bien es importante hidratarte al entrenar, tomar agua en exceso puede afectar tus niveles de sodio y causarte ganas de vomitar luego de hacer ejercicio.

 

Tómalo en cuenta al entrenar y olvídate de querer vomitar luego de hacer ejercicio. ¡Que nada te detenga!