Michael J. Fox (Marty McFly) ha enfrentado el Parkinson desde los 29 años

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Michael J. Fox y Christopher Lloyd.
Michael J. Fox (Marty McFly) ha enfrentado el Parkinson desde los 29 años. Foto IG @mrchristoperlloyd / @backtothefuturehq

En días pasados se llevó a cabo la Convención de Cómics de Nueva York, en donde se reencontraron Michael J. Fox y Christopher Lloyd. Este dúo es conocido por su magnífica actuación en Back to the Future, trilogía estrenada hace 37 años. Aunque estas obras maestras son queridas por todos los amantes de la ciencia ficción, no pudieron continuar debido a la enfermedad que afecta a Michael. Desde los 29 años ha enfrentado el Parkinson.

 

En 1991, cuando nuestro querido McFly tenía una carrera prometedora, fue diagnosticado con Parkinson. Los médicos señalaban que posiblemente podría trabajar 10 años más; aunque fue hasta 2020 que se retiró del medio artístico.

 

Aunque en la convención ambos actores se mostraron felices por su reencuentro, no pudo pasar desapercibido el deterioro en la salud de Michael. El Parkinson ha consumido su salud poco a poco, al grado de causarle dificultad para poder caminar o mantenerse de pie.

 

En este momento tan emotivo, nuestro querido Marty aprovechó para hablar más sobre la fundación que creó a su nombre, para recaudar fondos y seguir haciendo investigaciones sobre el Parkinson.

Parkinson.

Foto iStock

 

El Parkinson puede aparecer como un temblor apenas perceptible, que ocasiona rigidez. Conforme pasa el tiempo, los síntomas van empeorando. Desde cambiar la expresión en el rostro, hasta tener problemas al hablar.

 

La enfermedad puede ser diferente en cada persona, considerando factores como el estilo de vida, la genética y los desencadenantes ambientales. Además, las células nerviosas del cerebro se dañan, ocasionando su muerte progresiva. Al disminuir la dopamina (neurotransmisor cerebral), la actividad cerebral se vuelve anormal y deriva en movimientos alterados en el organismo.

 

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Los primeros signos de la enfermedad, señala Mayo Clinic son:

 

Temblores.

Bradicinesia (lentitud en los movimientos). Como tener complicaciones al caminar o al levantarte de la silla.

Rigidez muscular. Puede haber dolor al llevar a cabo algún movimiento.

Alteración en el equilibrio y la postura. 

Pérdida de movimientos automáticos. Parpadear, bostezar, sonreír.

Cambios en el habla o al escribir.

 

El Parkinson se divide en fases, dependiendo de qué tan avanzada está la enfermedad. No todos los pacientes pasarán por todos los estadíos.

 

Estadío #1. Es al inicio de la enfermedad y aparece la tríada parkinsoniana (rigidez, temblor y bradicinesia). Puede durar alrededor de 3 años.

Estadío #2. Aparecen trastornos bilaterales y axiales. Empiezan a aparecer los trastornos posturales. Dura aproximadamente 6 años.

Estadío #3. Hay trastorno del equilibrio, afectación de los reflejos posturales y de enderezamiento. El paciente sigue siendo independiente, pero puede presentar dificultades al caminar. Puede durar hasta 7 años.

Estadío #4. Requiere de ayuda para llevar a cabo sus actividades diarias. Dura hasta 9 años.

Estadío #5. El paciente requiere ayuda de otro para todas sus actividades. Suele durar 14 años.

 

Michael J. Fox (Marty McFly) ha enfrentado el Parkinson desde los 29 años

 

“El Parkinson ha traído personas que siguen llegando aún, pero es un regalo y no lo cambiaría por nada. (...) Personas como Chris han sido mucho para mí y muchos de ustedes lo han sido. No se trata de lo que tengo, se trata de lo que me han dado: una voz para hacer eso y ayudar a la gente”, destaca J. Fox.

 

“Después de 30 años con Parkinson, he llegado a una especie de ‘tregua’ con mi enfermedad. Tenemos una larga historia juntos y hace tiempo que me he dado cuenta de que el control queda descartado. En su lugar me he conformado con un arreglo que requiere adaptabilidad y resiliencia”.

 

Antes de recibir el diagnóstico de la enfermedad, él ya había notado dolores musculares o un ligero temblor en un dedo. Al llegar a los 40 años, los síntomas le impedían llevar a cabo muchas actividades cotidianas.

 

Desafortunadamente, sin tener medicación, queda inmóvil, petrificado e inexpresivo. Si eso fuera poco, también ha tenido que lidiar con un tumor en la médula espinal.

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