Nuevos juegos para el desarrollo infantil

Importantes investigaciones muestran que el entrenamiento físico y mental tienen efectos importantes y positivos en los niños y las niñas. De hecho, los fabricantes están creando juegos para infantes de 4 hasta 7 años de edad.

El entrenamiento se ha utilizado como terapia cognitiva de los adultos e infantes que padecen dislexia. También hay estudios que demuestran que podría ayudar en los trastornos de hiperactividad por déficit de atención y retención de la memoria.

Los niños y las niñas han demostrado que son más rápidos. En la teoría de Jean Piaget sobre el desarrollo cognitivo, hay cuatro etapas: la etapa sensor motora (durante la infancia), la etapa pre-operacional (la primera infancia), la etapa de las operaciones concretas (etapa de las operaciones elementales y principios de adolescencia) y etapa formal (de la adolescencia hasta la edad adulta).

En estas cuatro etapas, los niños aprenden basados en su desarrollo físico. Los pequeños y las pequeñas muestran la madurez en el uso de la lengua y al mismo tiempo, en su memoria. Aunque, eso significaría que su forma de pensar se hace de forma no-lógica. Si bien durante la etapa de operaciones concretas, los niños manipulan símbolos en un pensamiento lógico. En su etapa operacional formal, la inteligencia se relaciona con los conceptos abstractos.

Mediante la comprensión de las etapas del desarrollo cognitivo, los padres pueden saber cuándo introducir a los niños a ejercicios que desarrollen sus habilidades cognitivas. El entrenamiento podría ayudarlos en la organización y el pensamiento lógico, razonamiento e incluso en la ejecución de las funciones.

El ejercicio empieza desde el nacimiento

Según el psicólogo Keith Gibson, entrenar a los niños a desarrollar sus habilidades cognitivas, incluso antes de ir a la escuela, les ayudaría a alcanzar el éxito académico. De hecho, es importante estimular el cerebro desde el nacimiento. Según Gibson, es más importante enseñar habilidades de procesamiento, como el análisis del sonido para visualizar y crear asociaciones auditivas.

El entrenamiento es significativamente diferente de la tutoría. Esta sólo les ayuda a alcanzar metas específicas, mientras que las habilidades cognitivas no están plenamente desarrolladas y maximizadas.

Los padres que han optado por el entrenamiento del cerebro para complementar la educación de los niños y desarrollar sus habilidades son cada vez más entusiastas de su práctica. Los niños experimentaron:

• Mayor concentración
• Mayor capacidad en el análisis y solución de problemas
• Mejores calificaciones
• Respuesta más rápida a situaciones difíciles
• Mejora de la autoconfianza y autoestima

Una mejora de la confianza y la autoestima en realidad podría ayudar a los niños a interactuar más con sus compañeros. Aparte de eso, también demostró una mejor coordinación mano-ojo, que les ayude a incrementar su movilidad física ya sea en lo deportes u otras actividades físicas.

El entrenamiento es una actividad familiar que no sólo ayuda a los niños, también podría ayudar a los padres. Los niños pueden obtener el refuerzo positivo de sus padres para la formación exitosa y sus efectos posteriores en sus estudios. Los padres, por su parte, también podrían aprovechar el entrenamiento para reducir los efectos del envejecimiento, maximizar sus beneficios y mejorar su salud mental.