Esto es lo que pasa cuando comes el jamón baboso… ¿Lavarlo ayuda?
POR: Salud180.com
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A cualquiera le ha pasado llegar a casa hambriento después de un largo día, dispuesto a prepararse un sándwich; tener todos los ingredientes listos y, cuando agarras la rebanada de jamón, descubres que está babosa. Si estás dispuesta a comerlo, esto es lo que pasa cuando comes el jamón baboso… ¿Lavarlo ayuda?
Nuestros refrigeradores y despensas en ocasiones se convierten en mundos que guardan tesoros que olvidamos tener, pues el ritmo de vida, el resurtirlos constantemente o no ser tan asidua a cocinar, te llevan a acumular alimentos y cuando los descubres, te das cuenta que ya caducaron o su estado no es el más óptimo.
Eso puede no ser un problema si se trata de estos alimentos que puedes consumir después de caducar, sin embargo, cuando hablamos de lácteos, cárnicos o embutidos, como el jamón, la cosa cambia. Pero a pesar de esto, hemos crecido con la idea de que mientras lo laves y le quites lo baboso lo puedes comer y no pasa nada, ¿será cierto?
¿Qué pasa si comes el jamón baboso?
Primero lo primero: ¿qué es esa baba o viscosidad que aparece en algunos embutidos? De acuerdo al Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo (CIAD), se trata de bacterias ácido lácticas que crecen por el contenido de carbohidratos de estos alimentos y el alto grado de humedad.
Según los expertos, estas bacterias se parecen a los lactobacilos (¿conoces sus beneficios? Te los decimos) en que son buenas y en bajas concentraciones no son dañinas, aunque sí producen un olor y sabor ácido.
Incluso podríamos decir que protegen a nuestro jamón de las bacterias patógenas o las encargadas de enfermarnos, pues las inhiben. Sin embargo, pese a esto, los especialistas no recomiendan comer el jamón en este estado.
¿Qué pasa si lo haces? Existe porcentaje de probabilidad de que te enfermes, pues es imposible saber si realmente no crecieron otro tipo de bacterias, por lo tanto, su efecto en tu cuerpo puede no ser positivo.
Es cierto que “lavarlo” puede quitarle el mal olor o sabor y prevenir el daño, siempre y cuando las características desagradables desaparezcan, pues si sigue oliendo mal y aun así lo comes, corres el riesgo de padecer una infección gastrointestinal.
Por lo tanto, la primera recomendación sería evitar comerlo cuando está baboso y, si de plano no tienes otra cosa, revisar que al enjuagarlo su olor y sabor no sean muy fuertes o “malos”.
¡Ahórrate la mala experiencia!
El correcto almacenamiento de los alimentos ayuda a alargar su tiempo de vida y, lo más importante, prevenir intoxicaciones o problemas digestivos. En el caso de los embutidos, es muy importante que se mantengan en refrigeración, según los expertos, a una temperatura de 6 grados. Aquí te damos otros tips para almacenar tus alimentos.
De igual modo, lo ideal es consumirlo lo más pronto posible, pues de acuerdo a información de Cocina Delirante, el jamón cocido rebanado dura entre 3 y 4 días refrigerado, aproximadamente. Aunque también podrías congelarlo y durará entre 1 y 2 meses. Tómalo en cuenta, de este modo evitarás la mala experiencia de comer jamón baboso o desperdiciar la comida.
Ahora ya lo sabes, si bien puede no ser tan malo comer el jamón baboso (siempre y cuando lo enjuagues), lo mejor es seguir la regla que aplica prácticamente con cualquier alimento: si no huele ni sabe como debería, mejor aléjate de él.
Si quieres agregar bacterias buenas a tu cuerpo, una excelente forma es el yogur, en el siguiente video te decimos cómo bajar de peso comiéndolo.
