Tonifica tus brazos y reduce la flacidez usando un GARRAFÓN de agua

Incluir los brazos en nuestro entrenamiento físico, no sólo nos ayuda a la estética, sino a la fuerza. Tonifica tus brazos y reduce la flacidez usando un GARRAFÓN de agua.

Uno de los problemas más comunes que enfrentamos con nuestros brazos, es la flacidez o el llamado “brazo de salero”, algo que suele asociarse a la edad, pues suele tener relación a una disminución del colágeno y elastina, aunque no es la única razón.

Bajar de peso de forma brusca, llevar una dieta baja en proteínas y perder masa o tono muscular, también puede llevar a la flacidez de nuestros brazos y otras zonas. Ante este último caso, hay una respuesta: ejercicios de fortalecimiento muscular para tonificar nuestros brazos y ganar masa muscular.

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5 ejercicios con garrafón de agua para tonificar brazos

La mayoría tenemos en casa un garrafón de agua, es un buen momento para darle otro uso y mejorar la masa muscular de nuestros brazos. Dependiendo el ejercicio, puedes utilizar el clásico del asa a un costado o los de 5 litros con la agarradera en la tapa.

Tranquila, no necesitas llenarlos, únicamente ponle agua hasta donde puedas cargarlo.

EJERCICIO 1

Recarga tu rodilla izquierda sobre el asiento de una silla; inclina tu tronco al frente, flexionando ligeramente la rodilla derecha y apoya tu mano izquierda en el asiento. Carga el garrafón con la mano derecha, debe quedar ligeramente delante de tu rodilla.

Sube el codo y llévalo hacia atrás, en diagonal, manteniéndolo pegado al cuerpo. Baja y repite 12 veces antes de cambiar de brazo (recuerda también cambiar la rodilla que va recargada en la silla).

EJERCICIO 2

En la misma posición inicial anterior y el codo pegado al cuerpo, lleva el garrafón adelante y atrás, como si agitaras una campana. Realiza 12 repeticiones por brazo.

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EJERCICIO 3

Para un mayor agarre, opta por un garrafón de 5 litros. De pie, con las piernas abiertas a la altura de los hombros, toma el garrafón con una mano, con el puño viendo hacia arriba; sube los garrafones hasta que tu brazo forme un ángulo de 45°. Realiza 12 repeticiones y cambia de brazo.

Si no tienes garrafones de 5 litros, usa el de 20, únicamente haz algunos ajustes: toma el garrafón con ambas manos y sube. Repite 12 veces.

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EJERCICIO 4

De pie, toma el garrafón por el asa con ambas manos. Sube en dirección a tu barbilla para llegar a tu pecho, para hacer un remo al cuello. Realiza 12 repeticiones.

Si tu garrafón es de 5 litros, donde la agarradera no da suficiente espacio, pasa un trapo o mascada gruesa entre la agarradera para tener más espacio. Solo agárralo manteniendo los puños pegados.

EJERCICIO 5

En un banco o silla, recuéstate recargando tu espalda, desde los hombros hasta la espalda baja, para tener mayor soporte, flexiona las piernas y mantén la cadera elevada.  

Toma el garrafón con ambas manos, para que quede paralelo a tu rostro; lleva el garrafón atrás de tu cabeza y regresa. Repite 12 veces.

Realiza todos los ejercicios y repite el circuito 1 o 2 veces más. Recuerda que debes descansar al menos un día antes de volver a hacer los mismos ejercicios.

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Los garrafones de agua, cumplen la función de agregar peso a nuestro ejercicio, tal como lo harían las mancuernas o pesas, de esta forma, aumentamos la resistencia a nuestra rutina de fortalecimiento muscular.

Especialistas de Mayo Clinic, subrayan que es importante incluir este tipo de ejercicios en nuestro entrenamiento, pues nos ayudan a aumentar la masa muscular magra, lo cual no sólo nos da unos brazos más tonificados y con menos flacidez, también tiene beneficios para nuestra salud.

En primer lugar, nos ayuda a mejorar nuestra calidad de vida, pues con la edad vamos perdiendo masa muscular, lo cual, además de un aumento de la grasa, nos hace más propensos a la pérdida de equilibrio y accidentes.

Por otro lado, los ejercicios de fortalecimiento, ayudan a desarrollar huesos fuertes, al aumentar la densidad ósea, además de que pueden aumentar nuestro metabolismo y, con ello, la quema de calorías.

Eso sí, recuerda que antes de cualquier rutina de ejercicio, es importante calentar, así reduces tu riesgo de lesiones y, en caso de alguna afección médica o no haber hecho ejercicio antes, es mejor consultar a tu médico y buscar asesoría para realizar de forma correcta los ejercicios.

Finalmente, no dejes de lado el ejercicio aeróbico, además de ayudar a quemar grasa, mantiene saludable tu corazón y cuerpo.

Ya no hay pretexto, si no puedes o no te gusta ir al gym, tonifica tus brazos con ayuda de un garrafón de agua y reduce la flacidez, pero sobre todo, mantenlos fuertes y funcionales.