Incluye grasas buenas en tu dieta de esta manera

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Cómo incluir grasas buenas en la dieta / Cortesía iStock
Salud180, El estilo de vida saludable

POR: Guadalupe Jiménez Juárez

Periodista tampiqueña egresada de la Septién. Obsesionada con las letras y la fotografía, le encanta compartir historias y crear nuevas.

07-12-2016

Durante mucho tiempo hemos escuchado que el consumo de grasas es dañino para la salud, pero eso es verdad hasta cierto punto, porque las grasas saturadas sí son malas, en cambio las monoinsaturadas y poliinsaturadas son muy buenas.

 

El Ingeniero Químico Eduardo Molina, especialista en alimentos, platicó en exclusiva para Salud180, que muchas personas han restringido al extremo su ingesta de grasas en la dieta, pero esto es un error, ya que existen grasas buenas que aportan muchos beneficios al organismo.

 

También puedes ver: Grasas buenas vs. grasas malas

 

Aceite de canola

El aceite de canola contiene omega 3 y omega 6, que lo hace el aceite para cocinar o freír más saludable. Es muy bajo en grasas saturadas.

 

Además tiene el más alto nivel de esteroles vegetales y esteroles beta campesterol. Los estudios han demostrado que los alimentos que contienen una alta concentración de esteroles reducen el riesgo de diversas enfermedades del corazón.

 

Aceite de aguacate

El aceite de aguacate tiene la propiedad de controlar el colesterol en la sangre y fortalecer las arterias ante cualquier daño. Según algunos estudios, este aceite también ayuda a prevenir el cáncer y ayuda a mejorar la apariencia de la piel.

 

El aceite de aguacate es una excelente fuente de antioxidantes. 

 

Aceite de oliva

Este aceite es un favorito porque estimula el tránsito intestinal, previene todo tipo de cánceres relacionados con el sistema digestivo y favorece a la absorción de nutrientes. 

 

Un buen aceite de oliva te puede ayudar con problemas de acidez gástrica y hasta puede ayudarte a bajar de peso.

  Aceite de coco

Este aceite contiene ácido láurico, que en nuestro cuerpo se convierte en monolaurin y es muy bueno para tratamiento de virus, bacterias y enfermedades como herpes, gripe y hasta VIH. 

 

Y aunque más del 90% de los componentes del aceite de coco son grasas saturadas, también tiene ácidos grasos no saturados (monoinsaturados y poliinsaturados); por lo que logra equilibrarse a la perfección. Actualmente se usa mucho en repostería y da muy buenos resultado. 

 

Recuerda que siempre será bueno reemplazar un poco la dieta con grasas estables naturales y de esta forma equilibrar tu dieta.

 

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Aclaracion:

El contenido mostrado es responsabilidad del autor y refleja su punto de vista, más no la ideología de Salud180.com

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