5 razones para decirle sí al parto en agua
POR: Salud180.com
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El parto en agua es una nueva opción para el nacimiento de tu bebé. Esta tendencia que ha cobrado fuerza en los últimos años presenta muchas ventajas respecto al procedimiento tradicional, tanto para la madre como para el pequeño.
Beneficios de un parto de agua
El agua caliente es un analgésico natural que favorece la dilatación muscular y facilita el trabajo de parto, al evitar desgarres. Asimismo, reduce la producción de adrenalina y ayuda en la producción de endorfinas, sustancias que disminuyen la sensación del dolor.
La libertad de movimiento y capacidad de adoptar diversas posiciones dentro de la tina de agua, por ejemplo en cuclillas, libera la presión ejercida por el útero y facilita el descenso por el canal de parto, ya que éste se expande más al bascular con libertad el coxis.
Foto iStock
El bebé, que se encuentra acostumbrado a un ambiente acuático, sale y entra a un medio familiar sin cambios bruscos o violentos. Su primer estiramiento la realiza en un ambiente cálido y suave. Su adaptación a los cambios de luz, ruido y temperatura se realiza de manera gradual.
Los bebés que nacen por este procedimiento poseen un mayor desarrollo muscular, son menos irritables y más resistentes a las enfermedades durante su primer año de vida.
La madre se convierte en la protagonista de su parto, en un ambiente humanizado cálido y agradable, en compañía de su pareja, que se convierte en instructor psicoprofiláctico y parte del cuerpo médico.
En general, el parto en agua es un excelente recurso par alas mujeres embarazadas, ya que se mantienen lejos de los fármacos, porque la filosofía del parto psicoprofiláctico es reducir el uso de anestésicos, analgésicos y oxitócicos.
Además, durante el proceso del parto en agua realizado por expertos, se puede escuchar música, charlar con sus acompañantes, realizar ejercicios de relajación o tomar duchas calientes entre otras actividades. Y tú, ¿te animarías a tener un parto en agua?
Con información de Peques y Mamás.
