+13 VER GALERÍAFinalizada con la postura de niño, para relajar tus brazos y piernas. Que tu cabeza toque el piso.
Ojo, aquí lo que importa es que tu columna se estire y que tu pecho intente tocar tus piernasDespués de esta rutina, es necesario que relajes tu cuerpo. Siéntate con la espalda recta y tus pies estiradosRecuerda una pierna está en el suelo y la otra estirada. Alarga la mano contraria a la pierna elevadaOtra postura básica es lograr el equilibrio corporal con esta asana, en donde se tonifican brazos y piernasTu cuerpo está listo para realizar el perro mirando abajo, que alarga la columna vertebral y oxigena todo tu cerebroAhora sí, ya realizarás la cobra, que es muy benéfica para tu espalda y articulacionesBaja tu quijada al piso sin pegar tu estómago o piernas al tapete, esto ayudará a tus órganos internosPoco a poco, bajo el peso de tu espalda. La fuerza está en tus brazos, no en el cuello o espalda. Esto evitará lesionesExtiende tus piernas y tus brazos, sin encorvar la espalda. Recuerda tener los dedos de tus manos separadosLa cobra es una postura clave, que te otorga flexibilidad a tu columna, piernas y brazos. Así se iniciaAhora extiende tus brazos, para abrir tus campos energéticos y realizar tu rutina de yogaStephany Weingerz, maestra en yoga te ayuda a lograr diversas asanas que purifican tu cuerpo. Ésta es la posición inicial