¿Todo te parece mal? Tú podrías ser el problema...

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¿El problema eres tú, no los demás? Entérate por qué. Cortesía: Getty Images
Alejandra Reyes Calderón

POR: Alejandra Reyes Calderón

Egresada de la FCPyS de la UNAM. Adicta a la literatura, al patinaje y a los tacos al pastor.

09-03-2016

Cuando sientes que nadie te comprende y que el mundo conspira en tu contra, podrías pensar que el origen de tus conflictos son otras personas; pero realmente el problema eres tú, no los demás.
 

La interacción social nos permite conocer diferentes maneras de pensar y hacer las cosas. El problema surge cuando alguien no puede compaginar sus actividades con nadie más o siente que el resto de las personas no tiene la misma capacidad que él,  eso le genera conflictos y tiene problemas de adaptación”, asegura Óscar Galicia, investigador del Departamento de Psicología de la Universidad Iberoamericana.

 

 

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El también experto en manejo de emociones indica que este tipo de personas no pueden interactuar con su medio,  negociar y ceder en ciertos aspectos.

 

Cuando alguna persona le hace ver que sus ideas son equivocadas y se los dice, sienten que es un ataque personal o que las juzgan por su forma de ser. Estamos hablando de alguien que tiene problemas en su conducta, en sus emociones, que requiere la intervención de un experto en salud mental para que le ayude a entender y generar mecanismos que controlen sus impulsos, sus emociones e interactuar de manera adecuada.

 

 

Las personas tienen que saber que si están sufriendo, si se sienten infelices, es una condición que se transforma sólo cambiando el mismo sujeto. Si no soy feliz, no tengo por qué saber cómo hacerlo, para eso existe gente que se dedica a eso a ayudarte a desarrollar tu potencial y habilidades. Si no te sientes bien, busca ayuda”.

 

 

¿Cuál es el especialista adecuado?

 

Se puede recurrir a psicólogos, psicoterapeutas o incluso psiquiatras. La elección dependerá del tipo de problema a tratar y el tratamiento a seguir.

 

El que llegues con un terapeuta no necesariamente quiere decir que te quedes con él, tienes que hacer click, sentirte cómodo,  hasta que veas que la relación terapéutica te está ayudando”, agrega el también especialista en trastornos psiquiátricos.

 

Tener claro que el problema eres tú, no los demás, es un gran paso para tratar este tipo de conducta.

 

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