Recomendaciones para reducir efectos del asma

Por: Samuel Arroyo

El asma es una enfermedad crónica que afecta, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), a más de 235 millones de personas y se caracteriza por ataques recurrentes de disnea (dificultad para respirar) y sibilancias (silbido que se escucha al respirar); así lo explica el doctor David Alarid Coronel, médico adscrito al servicio de Neumología Pediátrica del Hospital General del Centro Médico Nacional (CMN) La Raza, del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).

 

En entrevista para Salud180, el médico Jorge Iván Rodríguez, nos explica los principales síntomas del asma:

 

 

Disminución en la capacidad para hacer ejercicio, falta de sueño, cambios permanentes en la función pulmonar, tos persistente y dificultad para respirar que requiere de un respirador, son algunas de las complicaciones que pacientes con asma pueden experimentar de no seguir indicaciones médicas, afirman especialistas.

 

El especialista del Seguro Social señaló que algunos factores asociados al asma son: el pelaje de perros y gatos, polvo, cambios de clima (principalmente por el frío), químicos en el aire o en los alimentos, humedad, polen, humo del tabaco e incluso la carga genética.

 

Por tal motivo, el IMSS emite recomendaciones a las personas con este padecimiento, para llevar un mejor control de la enfermedad y evitar complicaciones que pongan en riesgo su salud.

 

El neumólogo pediatra Alarid Coronel señaló que el asma es una enfermedad que no se cura pero sí se controla; para ello, es necesario tomar las siguientes medidas:

 

 

Para el diagnóstico de este padecimiento, los especialistas del IMSS realizan diversos estudios como pruebas de función pulmonar, mediciones del flujo máximo y radiografías de tórax, con la finalidad de conocer el estado en que se encuentran dichos órganos, además de la sintomatología que el paciente describa.

 

Finalmente, destacó que el tratamiento para este padecimiento tiene como objetivo evitar las sustancias que desencadenan los síntomas y controlar la inflamación de las vías respiratorias; sin embargo, en algunos casos es necesario el uso de inhaladores y fármacos para el control de las crisis causadas por el asma.