Naproxeno: para qué sirve y sus efectos secundarios

Dolor muscular, inflamación de garganta... hasta para la fiebre. Es muy probable que en algún momento hayas recurrido al infalible naproxeno para aliviar una infinidad de molestias, ¿pero es esa su aplicación terapéutica correcta? Conoce si estás usando bien este medicamento y cuáles son sus posibles efectos secundarios.

Cuando iba en la universidad y entrenaba en el gimnasio con gran intensidad (y varios errores de los que mejor no hablo), terminé en más de una ocasión con alguna lesión y consecuente inflamación, por lo que llegué a tomar naproxeno o diclofenaco.

De esa experiencia aprendí dos grandes lecciones: consultar un entrenador cuando vas al gym y que este medicamento y sus “familiares”, me caen como bomba al estómago. Desde entonces intento mantenerme lo más alejada de él, salvo en casos específicos donde la inflamación de garganta me obliga a tomarlo.

Naproxeno: para qué sirve y sus efectos secundarios Foto iStock

¿Qué es más fuerte el ibuprofeno o el naproxeno?

Aunque el ibuprofeno como el naproxeno suelen atacar casi lo mismo, aunque el segundo representa un mayor peligro cardiovascular; por ello no es la primera opción en personas con alguna alteración vascular o bien, presentan enfermedades como la hipertensión. 

¿Para qué sirve el naproxeno?

El naproxeno forma parte de los antiinflamatorios no esteroideos, los cuales, de acuerdo al Colegio Americano de Reumatología, funcionan bloqueando las enzimas que ayudan a producir las prostaglandinas, sustancias que desempeñan un papel importante en el dolor y la inflamación, por lo que están dentro de los analgésicos más utilizados en adultos.

En ese sentido, la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, distingue su uso sin prescripción médica o de venta libre, y con receta. En el primer caso, se utiliza para reducir la fiebre, dolor muscular, de cabeza cuando este es leve, para los cólicos mensturales, resfriado común, dolor de muelas y de espalda.

Por otro lado, los médicos suelen prescribirla para aliviar síntomas de la osteoartritis y artritis reumatoide y juvenil, así como la espondilitis anquilosante, un tipo de artrititis que afecta principalmente la columna vertebral. De igual modo, se receta para el dolor de hombro por bursitis, tendinitis, gota y otros tipos de dolor.

Naproxeno: para qué sirve y sus efectos secundarios Foto iStock

¿Cómo se toma el naproxeno?

Nunca está de más recordarte la importancia de consultar a tu médico, en especial cuando tus molestias no ceden o si sufres una enfermedad, para saber si no existe una contraindicación sobre este medicamento o una interacción con otros que tomes. El hecho de que se trate de medicamentos de venta libre, no significa que no debamos ser responsables al tomarlos.

¿Cuál es la dosis diaria de naproxeno?
 

De igual modo, lee muy bien las indicaciones en la caja del naproxeno y cualquier duda consúltala con el farmacéutico. En cuestiones generales, la Biblioteca de Medicina de los Estados Unidos, señala que sin receta, el naproxeno se toma cada 8 o 12 horas, según sea necesario y debe tomarse con un vaso de agua completo. También recomienda ingerirlo con los alimentos par prevenir el malestar estomacal.

Finalmente, si olvidas tomarla, hazlo en cuanto lo recuerdes, a menos que falte poco para la siguiente dosis, recuerda que no debes duplicarla, ni siquiera aumentarla en caso de sentir que no es efectivo. De sentir eso, consulta mejor a tu médico.

¿Qué personas no pueden tomar naproxeno?

La primera recomendación es identificar si has presentado alguna reacción alérgica o hipersensibilidad a algún componente de la fórmula, de ser así, evita tomarlo. Asimismo, si el ácido acetilsalicílico u otros ANIEs inducen el síndrome de asma, rinitis y pólipos nasales, no lo tomes. Otras contraindicaciones, son:

* Mujeres amamantando. Dado que se ha encontrado naproxeno en la leche materna, es mejor evitarlo, pues pueden haber reacciones adversas en los bebés. En caso de embarazo, consúltalo con tu médico.

* Personas con asma, insuficiencia cardíaca, hinchazón de manos, brazos, pies, tobillos o piernas, anemia o enfermedades renales o hepáticas.

* En caso de estar tomando otro medicamento contra el dolor sin prescripción médica.

* Si estás en tratamiento para otro padecimiento o incluso si tomas algún suplemento, consulta con tu médico si no hay alguna indicación especial.

Naproxeno: para qué sirve y sus efectos secundarios Foto iStock

¿Cuáles son los efectos secundarios del naproxeno?

La principal advertencia para el uso del naproxeno y los antiinflamatorios no esteroideos en general, viene de la Administración de Medicamentos y Alimentos de Estados Unidos (FDA), pues señala que este tipo de medicamentos pueden aumentar el riesgo de ataque al corazón o derrame cerebral que incluso podría llevar a la muerte.

Este riesgo puede aparecer en las primeras semanas de iniciar tratamiento y aumenta si continúas con él, por eso es muy importante tomarlo con precaución y jamás excederte de lo indicado. De hecho, lo ideal es tomar la dosis más baja que sea efectiva para controlar tus síntomas y durante el menor tiempo posible.

Independientemente de esto, puedes presentar problemas digestivos como estreñimiento, diarrea o gases, sed excesiva, dolor de cabeza o mareos, somnolencia, insomnio, síntomas de resfriado y cosquilleo en brazos o piernas.

Si presentas alguno de estos u otros más graves, como cambios en la visión, sensación de que la pastilla se adhiere a tu garganta, aumento de peso inexplicable, dificultad para respirar, hinchazón o cualquier otra manifestación “rara”, consulta inmediatamente a tu médico.

De igual modo, es importante tomar en cuenta que este medicamento puede causar úlceras, hemorragia o perforaciones en el estómago o intestino, en especial si lo tomas por periodos prolongados y/o consumes mucho alcohol. Por cierto, evita tomar alcohol mientras estés en tratamiento, pues puede aumentar la somnolencia.

El naproxeno es un gran aliado para muchas molestias y condiciones más graves y debilitantes, sin embargo, como cualquier medicamento, debe tomarse con responsabilidad para evitar provocar el efecto contrario y dañar tu cuerpo. Cuando tengas dudas sobre alguna sustancia activa, consúltalo con tu médico o farmacéutico.