Menopausia y climaterio: ¿influyen en el riesgo de osteoartritis?

La osteoartritis es el tipo más común de artritis, principalmente ligado a la edad, aunque también se le ha asociado a un tema hormonal. Menopausia y climaterio: ¿influyen para en el riesgo de tener osteoartritis?

Solemos hablar de climaterio y menopausia de forma indistinta, aunque no son lo mismo. De acuerdo a la Asociación Argentina para el Estudio del Climaterio, la menopausia es el término dado a la fecha de última menstruación en una mujer y fin de la fertilidad, a causa de una disminución en la producción de ciertas hormonas.

El climaterio, por su parte, es la etapa donde comienza una disminución de las hormonas y la pérdida de la capacidad reproductiva. Este proceso con cambios paulatinos, suele iniciar 5 años antes de la menopausia y durar de 10 a 15 años. Entre estos cambios, se encuentra el mayor riesgo de padecer osteoporosis, lo cual muchas veces se confunde con la osteoartritis.

En Salud180 platicamos con el Dr. Roberto Grijalva Moreno, especialista en ortopedia y traumatología, sobre la osteoartritis (u osteoartrosis) y los factores que influyen en ella, incluyendo el climaterio.

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¿Osteoartrosis y artritis reumatoide son lo mismo?

Una confusión común al hablar de enfermedades articulares, es la de osteoartrosis y artritis reumatoide, sin embargo, el Dr. Grijalva, puntualiza que se trata de dos padecimientos totalmente diferentes.

La artritis reumatoide es una enfermedad autoinmune, es decir, que tiene relación con el sistema inmunológico, y no sólo afecta las articulaciones, también otros tejidos de colágena, como órganos internos y piel.

En contraste, la osteoartrosis u osteoartritis es causada por el uso de la articulación, la herencia, los cuidados y, más sencillamente, el envejecimiento, pues todos en algún momento la tendremos en un grado mayor o menor; una enfermedad que puede llegar a ser incapacitante, pero por sí sola no causa muerte.

¿Durante el climaterio hay un mayor riesgo de osteoartrosis?

Aunque la osteoartrosis suele aparecer o presentar sus primeros síntomas más o menos en la edad del climaterio, éste no es un factor desencadenante como tal, más bien se suma a muchos factores, como la disminución de la actividad física.

El Dr. Grijalva, explica que estudios han encontrado que las mujeres en el climaterio, entre los 45 y 55 años, inician con alteraciones en el sistema musculoesquelético, las cuales se han adjudicado, en parte al descenso hormonal que influye en la calidad del cartílago pero, sobre todo, en la actividad funcional del paciente.

En ese sentido, algunas pacientes en esta etapa, presentan aumento de peso, mayores dolores articulares y musculares, lo cual conlleva una disminución de la actividad física. Esto, especialmente en quienes evolucionan de forma natural, sin terapia de reemplazo hormonal.

A la larga, estos trastornos pueden repercutir en la calidad articular, sumándose como un factor para la osteoartrosis. Pero, como tal, el climaterio no la causa.

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¿Cuáles son las principales causas y factores de riesgo para la osteoartrosis?

Existen diferentes factores de riesgo alrededor de la osteoartrosis. El Dr. Grijalva, señala que el principal es la genética, donde los antecedentes heredofamiliares son muy importantes, pues influyen mucho en la aparición de esta enfermedad.

En segundo lugar se encuentra la edad, al presentarse más en adultos mayores, aunque también existen factores de riesgo como la ocupación, la cual determina un mayor uso funcional de ciertas articulaciones y un mayor desgaste articular.

Lo mismo ocurre con la obesidad o sobrepeso, algunas veces asociados con trastornos hormonales, que aumentan el desgaste en las articulaciones de carga: cadera, rodilla, columna. Afortunadamente, muchos de estos factores pueden controlarse.

¿Existe un mayor riesgo de osteoartrosis en las mujeres?

En general, todas las personas tenemos riesgo de presentar un desgaste articular, sin embargo, un factor que podría asociarse con su presencia en mujeres, es el cambio hormonal que repercute en la aparición de osteoporosis, menos frecuente en hombres, la cual también podría repercutir en la función articular.

Sin embargo, no necesariamente hay una mayor prevalencia en mujeres. Eso sí, el especialista llama a no confundir la osteoporosis con osteoartritis. Pues la primera es la disminución en la densidad mineral ósea que da como resultado una fragilidad ósea que, si bien es un factor de riesgo, no es lo mismo.

¿Qué articulaciones son más afectadas por la osteoartrosis?

Cuando pensamos en desgaste de cartílago o articulaciones, solemos asociarlo con el dolor de rodilla, mas el Dr. Grijalva, apunta que dependerá mucho de qué tanto se hayan ocupado las articulaciones, el cómo se presente la osteoartrosis.

Por ejemplo, alguien que trabajó toda su vida con las manos, ya sea en labores del hogar o de otro tipo, probablemente estas articulaciones sean las más afectadas, pero en otros casos pueden ser las articulaciones de carga, muchas veces asociado con pacientes con un índice de masa corporal alto, que genera un mayor trabajo funcional en estas zonas.

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¿Cómo prevenir o reducir el impacto de la osteoartrosis?

De acuerdo al médico, lo más importante, es identificar los factores de riesgo de cada paciente, de esta forma es posible enfocarse en corregir algunos, como el sobrepeso, u orientar sobre el tipo de actividad física e incluso deportiva que hace el paciente.

Por otro lado, existen muchos medicamentos llamados condroprotectores, que ayudan a mejorar la salud articular. Algunos endurecen el cartílago, permitiendo que el desgaste sea más lento (aunque no lo pueden evitar), lo que alarga los años de vida útil de la articulación.

También existen los que ayudan a limpiar el líquido sinovial, lubricante por naturaleza de las articulaciones, mejorando la función articular, mientras otros mejoran la calidad de éste.

¿Cuál es el tratamiento de la osteoartrosis?

Al igual que ocurre con la prevención, parte clave del tratamiento es quitar los factores de riesgo que alteran más la enfermedad; también es muy importante hacer una clasificación, dependiendo del lugar donde se presenta y el grado de la osteoartrosis, explica el Dr. Grijalva.

En las etapas iniciales, se pueden incluir los condroprotectores, pero también es posible que sea necesario un tratamiento quirúrgico con una artroscopía de limpieza para ayudar a que no siga gastando la articulación.

Finalmente, cuando el cartílago es prácticamente nulo y existe dolor y limitación funcional grande, es posible requerir un reemplazo articular o prótesis. Lo que sí es importante tener en cuenta, es que, hasta hoy no hay ningún regenerador de cartílago que se pueda recomendar basado en evidencia científica.

Es cierto que el desgaste articular es una consecuencia de la edad, pero no debemos dejar de lado su atención. El tiempo de evolución marca la diferencia en una enfermedad como la osteoartritis, entre más temprano se detecte, mejor posibilidad de tratamiento, un avance más lento y una mayor calidad de vida.

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