Los complejos obstaculizan tu vida…

Por: Diana Oliva

Los complejos son respuestas que nuestra mente genera ante una situación dada que puede hacer evidente alguna aparente desventaja, y puede ser incluso, algo que nosotros mismos nos inventamos o imaginamos porque no estamos satisfechos con nosotros mismos.

 

En la mayoría de los casos, los complejos se van a tratar de pensamientos irracionales que nos atormentan y nos generan angustia. Lo más interesante de esto es que, pocas veces tienen que ver con nuestra realidad, hacemos grande ese complejo y superior”, así los describe Ruth Noriega Cerwinka, académica de la Universidad Iberoamericana.

 

¿De dónde surgen o por qué?

 

Su origen reside en múltiples factores, el primero de la lista son los defectos físicos; desde la altura, el peso, el color de ojos, pelo, hasta algún tipo de discapacidad.

 

De igual modo, pueden surgir por choques emocionales o deseos no satisfechos. Todo esto debido a la inevitable idea de siempre compararnos con los demás, ponernos estándares de belleza poco reales, aceptar la presión social, alimentar la necesidad de aceptación.

 

Supéralos…

 

Para hacerlo es necesario aceptar su existencia, así como es importante trabajar en las propias virtudes para potencializarlas y enfocarnos en lo positivo. Es decir, sacar el mejor provecho de las cualidades y habilidades con las que contamos.

 

Otro punto importante es ponernos retos y metas realistas para reforzar la autoestima, sin olvidar lo que tenemos y adónde podemos llegar, esto con el fin de evitar una frustración”, afirma Ruth Noriega Cerwinka.

 

Si el problema persiste es importante acudir con un profesional de salud que pueda ayudar a orientar, contener, afrontar; y así juntos encontrar la mejor solución para aquello que atenta contra nuestra calidad de vida.