Loratadina: para qué sirve y cuáles son sus efectos secundarios

La loratadina es una excelente aliada para combatir los síntomas de las reacciones alérgicas, pues sin duda, pueden ser muy molestos e incluso afectar tu día a día repercutiendo en tus actividades diarias, pero ¿para qué más sirve este medicamento? Conoce más sobre la loratadina y lo que debes considerar antes de tomarla.

De niña era muy enfermiza y las alergias no podían faltar, por suerte hoy no tengo episodios tan seguido, sin embargo, cuando recién rescaté a mi perrita, la cosa era muy diferente, pues el constante contacto con su pelo (o la caspa que desprende), me ocasionaba estornudos, lagrimeo y un malestar parecido al resfriado.

Afortunadamente, existen diferentes pastillas para la alergia que nos ayudan a controlar estos malestares para evitar frenar nuestras vidas. Entre estos se encuentra la loratadina, que ayuda a calmar estas manifestaciones. Conoce más sobre sus usos terapéuticos, efectos secundarios y otras cosas que debes tomar en cuenta.

¿Para qué es la loratadina?

De acuerdo a la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, la loratadina se usa para aliviar de forma temporal los síntomas de la rinitis alérgica, también conocida como fiebre del heno, que se produce por una respuesta a alérgenos en interiores o exteriores y presenta características similares a un resfriado, aunque también sirve para síntomas de otras alergias.

Asimismo, puede ayudar a disminuir la comezón y enrojecimiento causados por la urticaria, aunque no previene ésta u otras reacciones alérgicas de la piel. Al formar parte de los antihistamínicos, su función es bloquear la histamina, responsable de provocar las manifestaciones físicas de las alergias.

Por otro lado, cuando se combina con peseudofedrina, descongestionante nasal, puede ser útil para calmar las molestias del resfriado común o cuando hay congestión nasal en la rinitis alérgica.

¿Cómo se toma la loratadina?

En cuanto al cómo y cada cuánto se toma la loratadina, la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional Autónoma de México, indica que en adultos o mayores de 30 kg de peso, la indicación es de una tableta de 10 mg al día o una cucharada de 10 ml al día.

Por su parte, la Asociación Española de Pediatría, indica que en mayores de 2 años y hasta 12 años, con un peso igual o inferior a 30 kg, se recomiendan 5 ml de jarabe una vez al día y están contraindicados los comprimidos de 10 mg.

Al igual que con la mayoría de los medicamentos, si olvidas una dosis, debes tomarla en cuanto te des cuenta, a menos que falte poco para la siguiente, en todo caso, debes saltártela y evitar doblar la cantidad.

Asimismo, ambas instituciones recalcan la importancia de que en pacientes con falla hepática o insuficiencia renal, se ajuste la dosis a cantidades menores o más espaciadas. Aunque estas son indicaciones generales, no dudes consultar a tu médico, en especial en casos como éste o si estás en un tratamiento específico, él podrá indicarte de forma más certera la forma correcta de tomarla.

¿Quién no puede tomar loratadina?

Así como debe vigilarse su uso en pacientes con problemas hepáticos y renales, está contraindicado en:

* Personas con hipersensibilidad a la loratadina o medicamentos similares.

* Menores de 2 años.

* Mujeres embarazadas y en periodo de lactancia, pues los antihistamínicos puede inhibir la lactancia, además de que existe el riesgo de irritabilidad o excitación.

* Si bien puede usarse para tratar la urticaria o ronchas, si estas están amoratadas o ampolladas, no se debe tomar loratadina y es necesario consultar al médico.

¿Cuáles son los efectos secundarios de la loratadina?

La UNAM señala que los más frecuentes son dolor de cabeza, somnolencia, fatiga, resequedad de boca y dificultad para dormir en el caso de los niños entre 6 y 12 años, se han presentado nerviosismo, sibilancias, fatiga, hipercinesia (temblores, convulsiones o tics nerviosos por un aumento anormal de la actividad muscular), dolor abdominal, conjuntivitis, disfonía y malestar.

Coméntale a tu médico sobre estas reacciones... Pero si estos síntomas son graves o en mayor magnitud, o presentas sangrado por la nariz, llagas el a boca, debilidad, enrojecimiento o comezón en los ojos, sarpullido, urticaria, inflamación en alguna parte del cuerpo o dificultad para respirar, debes suspender el medicamento y recibir atención médica.

¿Qué tomar en cuenta antes de tomar loratadina?

* Siempre consulta con tu médico si estás tomando otros medicamentos, tanto con receta como vitaminas, suplementos o productos a base de hierbas. Este punto es importante, pues pueden existir reacciones cruzadas con otros antihistamínicos.

* Como ya leíste, es muy importante no tomar más de la dosis indicada para prevenir una sobredosis, en caso de presentar síntomas como ritmo cardíaco rápido, somnolencia, dolor de cabeza, convulsiones o dificultad para respirar, es importante solicitar atención médica.

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¿Cómo saber si tengo alergia?

Mayo Clinic señala que los síntomas dependen de la sustancia involucrada, sin embargo, en el caso de la rinitis alérgica o fiebre del heno, entre los síntomas están: secreción nasal o congestión, ojos llorosos, rojos y con comezón, estornudos, tos, comezón en la nariz, paladar o garganta, goteo posnasal y piel hinchada y azulada debajo de los ojos, así como fatiga que pueden empeorar en ciertos momentos del año.

Además de tomar loratadina, debes limitar la exposición a lo que te causa la “alergia”, ya sea el polen, ácaros del polvo, caspa de las mascotas, entre otros. Si los síntomas no mejoran, quizá sea necesario otro medicamento bajo prescripción médica.

La loratadina también puede funcionar frente a reacciones por picaduras de abeja, pero si presntas falta de aire o urticaria en todo el cuerpo, requieres atención médica.

Ahora que ya conoces los usos de la loratadina y cómo tomarla correctamente, libérate de las terribles molestias de la alergia... Eso sí, siempre con precaución y consultando a tu médico sobre la mejor opción frente a tus síntomas, además de avisar sobre cualquier efecto secundario.