Llanto interminable en bebés

El llanto es la forma de comunicación de un bebé para transmitir o expresar necesidades o incomodidad. Ambas circunstancias son inevitables, pero si es evitable el que el niño sufra por ellas. Saber identificar las causas posibles del llanto del bebé ayude a los papás a comprender a su hijo, especialmente a los primerizos.

Los bebés normalmente lloran de 1 a 3 horas diarias y es perfectamente normal que lo hagan en un intento por comunicar que sienten hambre, sed, incomodidad, cansancio o soledad. También es normal que un bebé tenga un período de irritabilidad durante la noche.

Sin embargo, si un bebé llora demasiado, esto puede sugerir la presencia de un trastorno que requiere tratamiento. Las causas más frecuentes del llanto son:

1. Aburrimiento o soledad

2. Cólicos

3. Incomodidad o irritación ocasionada por un pañal mojado o sucio, por gases excesivos o por sentir frío

4. Hambre o sed

5. Enfermedad

6. Infección (una causa probable si el llanto está acompañado de irritabilidad, letargo, inapetencia o fiebre).

7. Medicamentos

8. Contracciones y espasmos musculares normales que perturban el sueño

9. Dolor

10. Dentición.

Si el bebé parece tener hambre constantemente, a pesar de que lo alimentes con frecuencia, consulta con un médico acerca del crecimiento normal y horarios de alimentación apropiados.

Si el llanto es ocasionado por aburrimiento o por soledad, se recomienda acariciar, cargar y hablarle más al bebé y mantenerlo a la vista. Los juguetes que no ofrecen ningún tipo de peligro al bebé se deben mantener en un lugar donde los puedas ver.

Si el problema es causado por un trastorno del sueño, arrópalo firmemente en una frazada antes de llevarlo a la cama.

Si el bebé llora excesivamente porque tiene frío, abrígalo bien o ajusta la temperatura del ambiente. Generalmente, si los adultos sentimos frío, el bebé también.

Por ello, se recomienda que siempre revises las posibles causas de dolor o incomodidad en un bebé que llora. Y si llega a presentar algún otro síntoma como fiebre, o no parece haber explicación de su llanto, acude al pediatra de inmediato.

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