Embarazo en adolescentes se puede prevenir

De acuerdo con el reporte “Una Mirada General a la Infancia en México a lo Largo de su Frontera Norte”, elaborado por la Red por los Derechos de la Infancia en México, en nuestro país la cifra de embarazo en adolescentes se concentra en las 6 entidades de la frontera norte:

1. Baja California
2. Sonora
3. Chihuahua
4. Coahuila
5. Nuevo León
6. Tamaulipas 

El documento indica que 7% de las jóvenes entre 15 y 17 años de edad de esa región fronteriza, ha dado a luz a un bebé vivo, en contraste con 6% a nivel nacional.

Se trata de un asunto complejo con muchas razones para preocuparse y que puede tener solución si confiamos en la educación y la toma de consciencia de los distintos canales preventivos. En general, las adolescentes más jóvenes (12 a 14 años de edad) tienen mayor probabilidad de tener relaciones sexuales no planeadas y de ser forzadas al sexo. 

Existen factores de riesgo para una adolescente embarazada: la edad más joven; las desventajas económicas, el bajo rendimiento académico, el estado de salud o la drogodependencia. Una adolescente debe conocer y considerar cuidadosa y responsablemente todas las opciones disponibles para enfrentar su embarazo y esto incluye el aborto, la adopción o criar al niño con el apoyo de la comunidad o de la familia.

Cuidado prenatal temprano de una futura madre adolescente

Es un asunto prioritario que debe atenderse a través de programas especializados en embarazo adolescente para garantizar el nacimiento de bebés más sanos. Las adolescentes embarazadas necesitan valoración específica en el caso de que consuman tabaco, alcohol o drogas, y se les debe ofrecer apoyo y ayuda para que dejen estos hábitos.

Las posibles complicaciones de un embarazo en la adolescencia tienen que ver con mayores tasas de morbilidad y mortalidad, tanto para la madre como para el niño, debido entre otros factores a problemas de placenta previa, hipertensión inducida durante el embarazo, parto prematuro, anemia grave o toxemia.

Por otro lado, los bebés que nacen de mujeres adolescentes tienen una probabilidad de 2 a 6 veces más de tener bajo peso al nacer que aquellos cuyas madres tienen 20 años o más. La prematuridad juega el mayor papel en el bajo peso al nacer, pero el retraso en el crecimiento intrauterino (crecimiento inadecuado del feto durante el embarazo) también es un factor importante.

Algo más que debe saber una adolescente embarazada

Las madres adolescentes tienen más probabilidad que las mayores de tener un segundo hijo dentro de los dos años siguientes al primero. Por ello, debemos estimular y ayudar a estas jóvenes mujeres, y a las que han dado a luz recientemente, a que continúen en el colegio o que reingresen a programas educativos que les brinden las destrezas para ser mejores madres y poder encargarse de su hijo financiera y emocionalmente.

No hay que olvidar que las madres adolescentes se atrasan aproximadamente dos años con respecto a su grupo de edad para completar sus estudios, tienen mayor probabilidad de vivir en la pobreza y, en caso de tener antecedentes de abuso de sustancias, son más propensas a reincidir en este comportamiento aproximadamente a los 6 meses después del parto.