¿Cómo elegir la faja que necesitas?

Por: Karla T.

Desde comprimir el abdomen, levantar los glúteos, mantener los senos firmes, hasta ayudar contra el dolor lumbar (de espalda baja), son algunas "cualidades"  de las fajas, las cuales  cobran auge entre los mexicanos. 

 

Jesús Solís González, ortopedista y traumatólogo, adscrito al Hospital Angeles Pedregal,  señala que hay diferentes modelos, texturas y materiales; por ejemplo, las más comunes están hechas de lycra; sin embargo, no son recomendables porque irritan la piel.

 

"Prefiere las de algodón, neopreno, con varillas, cinturones o agujetas laterales para dar mayor ajuste, entre muchas variedades más", afirma Solís González

 

De acuerdo con el ortopedista, todas tienen propiedades y usos diferentes, por ello los expertos recomiendan que antes de seleccionar alguna acudas con el ortopedista, porque no es lo mismo una faja destinada a la belleza que otra para la rehabilitación tras una cirugía o fractura –en el brazo  o pierna– e incluso frente a los dolores musculares, como la lumbalgia.

 

En ese sentido, las fajas ayudan a dar soporte a los tejidos de la piel en el proceso de cicatrización o recuperación luego de una intervención quirúrgica como el aumento de glúteos, reducción del abdomen o la llegada del bebé.

 

Ante este panorama, las fajas no se  deben utilizar por periodos largos. Lo recomendable son 30 días durante cuatro horas diarias, pero esto es variable porque hay quienes requieren usarlas todo el día y sólo quitárselas para asearse o dormir.

 

Asimismo, las destinadas a la estética pueden ser de cuerpo completo (body), el objetivo de éstas es moldear el pecho, la cintura, los senos o erguir la espalda; las mismas deberán usarse ocho horas diarias y no más de seis meses.

 ¡Tómalo en cuenta!

 

 

El costo es variable dependiendo del material con el que esté elaborada y la marca. Así, las hay desde los 300 hasta los cinco mil pesos. Recuerda que debes usarla poco a poco, si notas irritación o eres sensible al material, prúebala debajo de una blusa delgadita y la idea es que no te atormente, sino te ayude a lograr tu objetivo.