¿Cómo afrontar la maternidad en la adolescencia?

Por: Judith Santiago González

El debut sexual para las niñas en México es a los 14 años y para los niños a los 12. En estados como Guerrero, Oaxaca o Chiapas se acepta el embarazo en la adolescencia. Los adolescentes desde los 12 años forman pareja y tienen hijos.

 

En otros contextos socioculturales, el embarazo adolescente es motivo de conflictos emocionales, familiares y sociales.  

 

En ese escenario, el embarazo suele ser inesperado, justo porque en la mayoría de los casos el acto sexual no fue planeado, comenta la maestra Ena Eréndira Niño Calixto, de la Facultad de Psicología de la UNAM.

 

 

“Idealización del embarazo”

 

Algunos jóvenes viven la gestación como una motivación y experimentan la llamada “idealización del embarazo”, con el que crean expectativas sobre su hijo. Otros lo enfrentan con sentimientos de vergüenza y culpa.

 

Aunado a que a los adolescentes no están preparados para asumir sus actos con responsabilidad, es decir, carecen de la habilidad para responder ante las situaciones que la vida les presente", indica la sicóloga universitaria.

 

Por eso el impacto es muy fuerte, ya que los pone en situación de desventaja, ya que no tienen la capacidad económica, afectiva y emocional para hacerse cargo del embarazo.

 

Además tener un hijo a edades tempranas tiene una repercusión social, pues en la mayoría de los casos las adolescentes abandonan la escuela y pasan por procesos de discriminación social y de marginación.

 

En México, el debut sexual de las niñas es a los 14 años y los niños a los 12

 

La investigadora dice que el impacto es mayor en la mujer porque la mayoría de los hombres no se responsabilizan del acto sexual, e incluso, llegan a desligarse afectiva y emocionalmente de la paternidad.

 

Una manera de prevenir el embarazo en adolescentes es a través de la educación de la sexualidad. Pero no sólo en términos biológicos, también hace falta educación afectiva emocional y el desarrollo de habilidades para la toma de decisiones.

 

Lo ideal es preparar a los adolescentes para que puedan tomar la decisión de realizar el acto sexual, sabiendo qué es y teniendo claras las consecuencias de éste.