Amor determina desarrollo infantil

Para criar hijos sanos emocionalmente, que se sientan amados y seguros en el mundo de hoy, sin duda necesitamos nuevas herramientas que nos permitan lograrlo, de la mejor manera posible, para el desarrollo infantil.

Lo que hagas con ellos ahora, ya sea que tengan 2, 5 o 12 años, impactará en ellos y en todo lo que hagan de mayores. Por esto, es importante tomar conciencia de que estás criando adultos.

Lo que haces ahora es poner los cimientos a futuro. Ahora están bajo construcción, como una casa que se está levantando. ¿Aguantará tu construcción las fuerzas y embates de la vida o sus cimientos se cuartearán y su techo se filtrará?

Esto dependerá principalmente de cómo moldees y le des forma a sus valores, creencias, conducta, capacidad de tomar decisiones, además de cómo honres su individualidad, nutras sus talentos y dones particulares.

Aprender a amar y a confiar en el amor son los grandes logros que hacen posible el desarrollo humano. Se ha demostrado que la falta de amor y de cuidados maternos en la crianza de un niño, produce muchas veces la incapacidad de amar por el resto de su vida.

La base fundamental para el adecuado desarrollo humano es la confianza en la disponibilidad de las personas importantes en los dos primeros años de vida, ya que un niño solicita: caricias, comprensión, comunicación, atención; así, el niño aprenderá a confiar en el amor.

Para que un niño aprenda a amar, el primer paso es amarlo. De acuerdo con el psicólogo Eric Erickson, la calidad en las relaciones interpersonales en sus primeros dos años será decisiva para desarrollar una personalidad sana.

Si esta experiencia no fue del todo satisfactoria, la persona será muy vulnerable emocionalmente y su única esperanza será encontrar a alguien que la ame incondicionalmente (como no lo amaron en su momento), lo cual lo hará muy dependiente.

Sin embargo, es necesario recalcar que privar al niño de la frustración, es tan malo como privarlo del amor materno. La clave es buscar un equilibrio entre el placer y el displacer.

Las causas principales de los problemas afectivos durante el desarrollo son fundamentalmente tres:

1. El abandono o la falta de cuidados maternos.

2. La discontinuidad o ruptura de las relaciones afectivas en los 3 primeros años de vida.

3. Cuando hay muchas figuras maternas o ninguna en realidad.

El afecto es tan importante que la falta de amor materno puede incluso limitar el crecimiento físico (estatura), debido a que la inestabilidad emocional hace que no coman ni duerman apropiadamente.

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