Alcohol, enemigo de los jóvenes

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El estudio es un factor que disminuye el riesgo de consumo, pero en el país esto es alarmante, ya que cerca de 7 millones de adolescentes no estudian/ Fuente: Photos.com

En la actualidad, los adolescentes son el grupo poblacional que presenta los niveles más altos de consumo de alcohol: beben varias veces a la semana o grandes cantidades en una sola ocasión.

 

En esta problemática el número de mujeres está en aumento y, de acuerdo a la Encuesta Nacional de Adicciones 2008, poco más de cuatro millones de mexicanos presentan un patrón de abuso-dependencia al alcohol.

 

El estudio es un factor que disminuye el riesgo de consumo, pero en el país esto es alarmante, ya que cerca de 7 millones de adolescentes no estudian. Por ello, se encuentran más expuestos a consumir drogas y alcohol.

El alcoholismo es una problemática frecuente en la población joven. Entre los universitarios se han detectado tres patrones de consumo: el social, de abuso y de dependencia, explicó Benjamín Guerrero López, coordinador de la Clínica del Programa de Salud Mental del Departamento de Psiquiatría y Salud Mental de la Facultad de Medicina de la UNAM.

 

El tratamiento para esta enfermedad, agregó, debe ser integral e incluir las partes médica, psiquiátrica, psicológica y de apoyo de grupo, pues cuando esto sucede el éxito que se obtiene con los pacientes es mayor.

La dependencia daña la salud

 

 

El alcohol proporciona un efecto tranquilizante que está relacionado con circuitos neurobiológicos de recompensa y placer, así como con la dopamina, sustancia producida en el sistema nervioso. Cuando aumenta su consumo se producen cambios en estos circuitos que a su vez provocarán modificaciones a nivel cerebral, pero también hepático y corporal.

El alcoholismo es una enfermedad que se conoce como dependencia al alcohol, la cual está relacionada con dos factores: un síndrome de abstinencia y uno de tolerancia, comentó.

 

En el primero el organismo necesita esa sustancia para funcionar normalmente y cuando no la tiene se generan reacciones como temblor, inquietud y desesperación, que sólo desaparecen cuando la persona vuelve a consumir alcohol.

El síntoma de tolerancia es cuando el organismo va adaptándose a consumir mayores cantidades de alcohol, generando cambios biológicos y bioquímicos que permiten que la persona ingiera cada vez más esta sustancia.

 

El doctor Guerrero López describió que estos factores no dependen del tiempo durante el cual se haya consumido alcohol, sino de su aparición. “Hay personas que tardan más tiempo y otras que consumen consuetudinariamente y no lo desarrollan, porque también depende de las cantidades; hay gente que con menos copas se marea y otras que necesitan muchas, sin que presenten esa tolerancia que se van creando cuando uno consume alcohol”.

Algunos trastornos, como la depresión o la ansiedad, generan problemas de alcoholismo o viceversa. Aunado a esto, el especialista señaló que cada vez son más las mujeres quienes consumen alcohol como una forma de disminuir el dolor emocional durante sus estados depresivos.

 

Además, conforme la dependencia a esta sustancia aumenta, el cerebro se daña y se llegan a desarrollar trastornos parecidos a la demencia o psicóticos, como la esquizofrenia.

Reconocimiento y tratamiento

 

 

Guerrero López detalló que dos criterios para determinar si hay abuso de alcohol: que la persona lo consuma en situaciones de riesgo y modifique su desarrollo social.

“Primero se empieza con un patrón de abuso. El siguiente paso es que cuando no toma se siente mal, ahí ya se convirtió en un problema de adicción”.

 

Uno de los problemas a los que se enfrenta una persona con alcoholismo es que siente que tiene control sobre su patrón de consumo, cuando no es así y, por lo tanto, no reconoce su dependencia al alcohol y no podrá iniciar un tratamiento.

Cada tratamiento debe ser individualizado y personalizado. El 90% de los pacientes que se someten a tratamiento recaen, lo cual depende de la fase en la que se encuentren, qué tan conscientes estén de su alcoholismo y qué tan motivados se sientan para continuar con el tratamiento.

 

Los jóvenes son la población que está en mayor riesgo de consumir cualquier tipo de sustancias, por lo que estudiar es una opción para mantenerlos alejados de cualquier adicción a sustancias, reiteró.

Aclaracion:

El contenido mostrado es responsabilidad del autor y refleja su punto de vista, más no la ideología de Salud180.com

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