A esto te arriesgas si te expones mucho al sol

Por: Hospital Ángeles

Los rayos solares son una fuente de salud para nuestro organismo. Su incidencia sobre la piel favorece tanto un buen estado de ánimo como la producción de vitamina D, que regula, entre otras cosas, la concentración de calcio en los huesos y la sangre. Sin embargo, una exposición prolongada puede generar la aparición de melanomas, un tumor maligno causante de serios problemas a la salud.

 

La piel es el órgano más grande del cuerpo, y función principal es la de protegernos de los cambios térmicos, la radiación solar e infecciones. También nos ayuda a controlar la temperatura corporal, así como a la acumulación de agua y grasa en nuestro organismo. Tiene varias capas, pero las dos principales son la epidermis (superior o externa) y la dermis (inferior o interna).

 

Alta protección

 

En un futuro se calcula que una de cada 100 personas padecerá un melanoma por no protegerse adecuadamente del sol y sus efectos. Es importante hacerlo durante todo el año y no sólo en el verano o al acudir a la playa, ya que nuestra piel también recibe los rayos UV incluso en días nublados o con neblina; éstos se reflejan en superficies como la del agua, el cemento, la arena o la nieve.

 

En México la exposición a la radiación UV en ambientes exteriores es más dañina entre las 10:00 y 16:00 horas. El período de máximo nivel de incidencia de la radiación se extiende desde finales de la primavera hasta principios del verano.

 

Algunos consejos para protegernos de la radiación UV, son:

 

  ¿Cómo se diagnostica el cáncer de piel?

 

Los lunares pueden ser de origen congénito o aparecer a lo largo de nuestra vida. El sol es uno de los factores que pueden incidir en su cambio de estado, por ello es importante  para saber si un lunar puede evolucionar hacia un melanoma.

 

Por todo lo anterior es importante acudir con un especialista (cirujano oncólogo o dermatólogo) para que realice una exploración física de nuestros lunares sospechosos, siempre considerando la llamada regla A-B-C-D-E, la cual consiste en:

 

 

Aunque los síntomas varían de un tipo de cáncer a otro, en general esta serie de características se repiten en todos los casos, y deben servir de señal de alarma para acudir al dermatólogo ante la menor sospecha. Así las marcas o manchas en la piel son la primera señal de un posible tumor, sobre todo cuando presentan un color rojo y una textura escamosa, o se produce una alteración en las ya existentes.

 

Confirmados los síntomas, será el dermatólogo quien diagnostique la existencia, o no, de un tumor, mediante la realización de una biopsia. La muestra puede conseguirse raspando las capas superiores de la piel o extrayendo una parte de la “protuberancia”, de la parte más profunda o posibles partículas cancerígenas.

 

Tratamiento

 

Respecto al tratamiento, el pronóstico de éxito depende principalmente del estadio del cáncer y el procedimiento que se utilice para eliminarlo. Las opciones dependen de varios aspectos:
 

 

Es importante que el manejo del cáncer de piel se realice de manera multidisciplinaria. El equipo médico debe estar conformado por cirujanos oncólogos, dermatólogos, dermatopatólogos, cirujanos plásticos, oncólogos, radioterapeutas, radiólogos y psicoterapeutas.

 

El Centro Oncológico del Hospital Angeles Lomas tiene la finalidad de brindar una excelente atención médica a todo paciente que acuda a nuestra institución, a través de un manejo humanístico, integral, individualizado y multidisciplinario.