8 razones para que fluyas en la vida

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Al aprender a fluir, los problemas se ven desde otra perspectiva. Cortesía: Getty Images
Alejandra Reyes Calderón

POR: Alejandra Reyes Calderón

Egresada de la FCPyS de la UNAM. Adicta a la literatura, al patinaje y a los tacos al pastor.

17-03-2016

Aprender a fluir significa navegar sin resistencia, adaptando el curso y la actitud a las condiciones externas que no controlamos. No poner resistencia hará que el camino sea más agradable y menos estresante”,  indica Claudia Gutiérrez Flores, Doctora en Psicología de la UNAM.

 

La especialista señala que una persona fluye cuando tiene la sensación de que la situación es fácil, se siente tranquilo, entusiasmado, alegre y acepta lo que sucede.

 

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¿En qué momento no estamos fluyendo?

 

“Cuando existen sentimientos de frustración, enfado, envidia, celos, o tenemos la sensación de que todo es difícil, o que requiere mucho esfuerzo”, aclara la también experta en psicología positiva.

 

Para poder fluir…

 

Gutiérrez Flores recomienda estas técnicas para aprender a fluir. Síguelas y ponlas en práctica diariamente.

 

Cortesía: Getty Images

 

 

1. Aceptación

 

Si esquivas o evitas determinada situación, si te sientes mal, a disgusto o nervioso, entonces no estás aceptando la situación o el momento. Aceptarlo es el primer paso para poder fluir.

 

2. Vive tu presente

 

No te obsesiones con el futuro; es mejor que te enfoques en el presente. Está bien planear las cosas con sentido y fijarse metas, pero lo realmente importante es vivir tu vida tal como es ahora, y no estar preocupado por lo que pasó o lo que puede suceder en el futuro.

  3. Redirige tu atención

 

Cuando te tomas las cosas personalmente, centras tu atención en lo que sientes, en lugar de lo que la persona ha dicho o hecho. Estos sentimientos pueden intensificarse si te obsesionas con ellos.

 

4. Flexibilidad emocional

 

Aprender a reconocer, aceptar y sentir las emociones es clave para que éstas fluyan con naturalidad, en vez de frenarlas y hacer que se queden con nosotros más tiempo del necesario.

 

 

 

5. Ocuparte, no preocuparte

 

Si estás a disgusto en una situación, responsabilízate de tu emoción, y de hacer lo que sea necesario para aceptarla y adecuarla de acuerdo a tus intereses.

  6. Analiza y comprende

 

Comprender no significa tolerar o justificar lo que te incomoda; es darte a ti mismo ese momento de tranquilidad y claridad mental necesaria para entender la situación sin que existan interpretaciones negativas que deformen la realidad.

 

7. Ríe

 

Si algo o alguien te molesta, mira el panorama de la vida. Pregúntate si realmente lo que te está molestando le es tan importante. Al verlo desde esta perspectiva te podrás reír (hazlo aunque no tengas ganas) y te sentirás menos estresado.

 

8.  Visualízate

 

Verte haciendo los cambios y enfrentando de la mejor manera la situación, te ayudará en gran medida a fluir más rápido y sin complicaciones.

 

Al aprender a fluir los problemas podrás encontrar oportunidades en donde se producen los cambios. ¡Inténtalo y verás las cosas desde otra perspectiva!

 

 

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