Yoga como terapia para el Parkinson

Descrita por primera vez como “parálisis espástica”, la enfermedad que hoy se conoce como Parkinson, es hasta la fecha, incurable y se ignora su causa. Sin embargo, sí se han hecho grandes progresos en su estudio y tratamiento. Se sabe que afecta a cerca de medio millón de estadounidenses mayores de edad, lo que significa una persona de cada 100. Esta cifra no incluye a los miles que presentan síntomas de la enfermedad que no son lo suficientemente graves como para impulsarlos a buscar un diagnóstico.

El diagnóstico de la enfermedad de Parkinson se basa en los síntomas del paciente y en ciertas pruebas neurológicas y neuropsicológicas, para descartar otras posibles causas de esos síntomas. Algunos casos de lo que los médicos llaman Parkinson, es causado por medicamentos potentes utilizados en el tratamiento de la esquizofrenia y otras enfermedades psiquiátricas o son consecuencia de una intoxicación por el manganeso.

A través de medicamentos, regímenes de ejercicios y medidas de adaptación, los tratamientos modernos pueden prevenir o reducir los síntomas de la enfermedad de Parkinson, lo que permite a los pacientes llevar una vida plena y activa durante años después de su diagnóstico y, a menudo por el resto de sus vidas, porque la mayoría de sus víctimas son personas mayores de 65; sin embargo, las etapas avanzadas de la enfermedad pueden dejar a los pacientes vulnerables a la neumonía, trombosis e infecciones que pueden llegar a ser fatales.

El yoga tiene un papel importante en el tratamiento del Parkinson, ya que ha surgido como una alternativa terapéutica benéfica y una forma ideal de ejercicio debido a sus movimientos lentos.

Los pasos mencionados a continuación puede ayudar efectivamente a las personas con Parkinson:

• Control de la respiración o Pranayama. Este tipo de yoga ayuda en momentos de pánico En esta forma de yoga, la mente está siempre alerta.
• Una de las formas más útiles de yoga utilizado para el Parkinson es Ashtanga Yo, que trabaja para fortalecer el cuerpo y aumentar la circulación sanguínea.

La práctica diaria del yoga es esencial, para fortalecer los músculos. Se aconseja la práctica diaria, pero no lo suficiente como para causar fatiga.

Otro resultado también del Parkinson en la pérdida de movimiento de los músculos faciales. El Pranayama y otros movimientos del yoga pueden ayudar a relajarlos.