Depresión en deportistas profesionales

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Michael Yardy
Michael Yardy
Samuel Arroyo

POR: Samuel Arroyo

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04-04-2011

La depresión no respeta nivel social, nacionalidad o profesión. Cualquiera puede estar expuesto este padecimiento. Una de cada cinco personas sufre depresión alguna vez en su vida y los deportistas no son la excepción. En los últimos años hemos visto distintos casos en los diversos deportes de alto rendimiento en el mundo; el más reciente es el del juagador británico de cricket, Michael Yardy capitán de Sussex County Cricket Club, quien se retiró del mundial de la especialidad argumentando estar muy deprimido.



Diversas razones pueden influir para que este padecimiento se presente en la vida de los atletas; por ejemplo: los deportistas, en especial los profesionales y de alto rendimiento están sometidos a grandes niveles de estrés, debido a que las expectativas que de ellos se tiene a veces superan sus capacidades psicológicas. Ellos mismo se plantean metas que, si nos las cumplen, los hacen caer en un estado de depresión que pocas veces expresan y por ende puede complicarse hasta llegar a consecuencias fatales.

 

Otra razón puede ser la soledad. Debido a los compromisos deportivos, los deportistas, en especial los jugadores de fútbol, rugby, cricket, básquetbol, etcétera, hacen largas giras que los mantienen alejados de sus familias por periodos considerables de tiempo. Esta misma soledad, puede dar como consecuencia un rendimiento profesional por debajo de lo esperado, lo que a la larga resulta en depresión.

 

 

El Síndrome Jamaicón Villegas

 

Un ejemplo curioso de este padecimiento es recordado por los aficionados mexicanos, cuando a finales de la década de los 50 y principios de los 60, surgió lo que desde entonces es conocido como el Síndrome del Jamaicón Villegas; gracias a José Villegas Tavares, jugador de la Selección Mexicana de fútbol es esa época. A este respecto hay dos versiones:

 

  1. Preparándose para el Mundial de Chile 1962 se decía que si el Jamaicón había vencido una y otra vez a Garrincha con las Chivas había suficiente defensa para el combinado mexicano. La Federación concertó una gira por Europa y con Ignacio Trelles al mando viajaron a Londres donde disputando partidos de fogueo, Trelles decidió alinear al portero suplente Antonio “Piolín” Mota. Al comunicarle la alineación, Mota se preocupo mucho pero le dijo Trelles que estuviera tranquilo por que el Jamaicón estaría para apoyarlo. Ese partido fue una derrota por ocho goles ante la selección inglesa, ese día Villegas no pudo contener al atacante inglés. Al ser entrevistado el Jamaicón por un periodista dijo: "que extrañaba a su mamacita, que llevaba días sin tomarse una birria y que la vida no era vida si no estaba en su tierra"
  2. De acuerdo con el periodista Carlos Calderón la escena se sitúa en Lisboa previo al Mundial de Suecia 1958 donde se ofreció una cena al equipo mexicano. Villegas abandonó la cena y al no aparecer Trelles fue a buscarlo y lo encontró deambulando melancólico en los jardines del hotel y es donde se produce el siguiente diálogo: “¿José ya cenaste, qué haces aquí afuera?”. El Jamaicón le respondió: “Cómo voy a cenar si tienen preparada una cena de rotos. Yo lo que quiero son mis chalupas, unos buenos sopes y no esas porquerías que ni de México son”.

 

Estas que parecen simples anécdotas chuscas, en verdad reflejan la realidad depresiva de lo que muchos deportistas viven, pero que poco externan para buscar ayuda profesional.

 

 

Terapia como tratamiento

 



Llevar una terapia es el primer paso y el más importante. Ayuda a recuperar la confianza en uno mismo y le brinda al deportista la oportunidad de hablar con alguien sobre cómo se siente. Sin embargo, los expertos dejan en claro que no hay reglas simples y rápidas sobre cómo tratar a un deportista que sufre depresión.

 

En opinión del psicólogo clínico especializado en deportes, Victor Thompson, el terapeuta debe juzgar con mucha cautela cómo ganar la confianza del paciente antes de ofrecerle su ayuda. "Trabajar con un atleta deprimido es como trabajar con alguien que ha perdido las esperanzas y ve todo de forma negativa. Tienes que ser cuidadoso", comenta Thompson en entrevista para BBC Mundo.

 

Por otra parte, lo que funciona con un deportista puede no funcionar con otro. Cada depresión es diferente. En los casos en los que el deportista deprimido decide cancelar una gira y regresar a su casa, la reacción de la familia y los amigos es vital para comenzar el proceso de recuperación.

 

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