La fiebre tifoidea viene con las inundaciones
POR: Samuel Arroyo
Somos el sitio líder de estilo de vida en México y América Latina. Sumamos a los mejores expertos, para mejorar tu calidad de vida.
Cada año, la fiebre tifoidea afecta a 17 millones de personas en el mundo, con aproximadamente 600 mil casos de muerte. Con la llegada de huracanes, monzones e inundaciones en muchos países en desarrollo, la tifoidea hace su fatal aparición contaminando agua y alimentos y provocando enfermedad y desolación. De acuerdo con un documento de la Organización de Naciones Unidas (ONU), se trata de una infección causada por una de las 107 variantes de la bacteria conocida como salmonela. Aunque la fiebre tifoidea es un tipo de salmonelosis, sus consecuencias son mucho más graves, con tratamiento y pronóstico distintos a las gastroenteritis comunes. En México, este tipo de enfermedades es la primera causa de muerte entre la población infantil, sobre todo, en menores de 5 años.
¿Cómo se transmite la fiebre tifoidea?
La fiebre tifoidea es transmitida por comida y agua contaminadas, por medio de la orina y desperdicios fecales del paciente, así como por portadores. El agua contaminada es la fuente más común de la tifoidea. Se ha comprobado que los mariscos de aguas contaminadas por drenajes, los vegetales regados con aguas negras, la comida cruda, la leche o productos lácteos contaminados son también una fuente de infección. Se mantiene controlada mediante un tratamiento con antibióticos específicos, pero recientemente ha desarrollado variantes más resistentes. Sus síntomas aparecen de manera repentina y los más comunes son fiebre constante, severos dolores de cabeza, nausea, ausencia total de apetito, estreñimiento o, en algunos casos, diarrea. Algunas formas severas han sido relacionadas con discapacidad mental y meningitis. La tasa de casos fatales puede reducirse de 10 a menos de 1%, siempre y cuando exista una atención antibiótica apropiada.
¿Como puede prevenirse la fiebre tifoidea?
Los médicos del Departamento de Salud de la Universidad de Virginia, Estados Unidos señalan la higiene como la medida de prevención más importante: lavarse cuidadosamente las manos después de ir al baño y antes de preparar y/o comer alimentos. Las personas que viven en la misma casa o tienen contacto directo con una persona con fiebre tifoidea necesitan ser examinadas para determinar si tienen la enfermedad y no pueden trabajar en la preparación de alimentos hasta que esté descartada la infección. Existe una vacuna que proporciona cierta protección para personas que viajan a regiones donde la enfermedad es común y donde, además, necesitan tener cuidado con los alimentos o el agua que consumen.