Fitoterapia mexicana es una tradición milenaria

México cuenta con una importante herencia prehispánica en materia de hierbas medicinales, se estima que existen más de 5 mil especies de flora medicinal. Y es que todos los pueblos del mundo han usado y siguen usando la fitoterapia para atender sus problemas de salud; a escala mundial, casi 80% de la población, recurre a los remedios herbolarios. La fitoterapia, como ciencia estudia la utilización de las plantas medicinales y sus derivados con finalidades terapéutica, ya sea para prevenir, aliviar o curar las enfermedades y sigue siendo una práctica prometedora que se resiste al paso del tiempo.

Mientras que en México, ocho de cada 10 personas utilizan alguna planta para combatir enfermedades, según Abigail Aguilar Contreras, jefa del herbario del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS). En España un reciente estudio realizado por el Centro de investigación sobre Fitoterapia, muestra que uno de cada tres españoles consume plantas medicinales de forma habitual.

En peligro de extinción

Según la organización Plantlife, de las 50 mil especies medicinales disponibles en la naturaleza, 15 mil están en peligro de extinción. Con ellas se perdería no sólo la biodiversidad, sino una enorme cantidad de tratamientos útiles. Una de las principales causas del problema es la explotación comercial excesiva, ya que a menudo la recolección se efectúa de forma poco sostenible y con escaso cuidado. La destrucción del hábitat, la contaminación y la competencia con especies invasivas son otras causas de la extinción de este tipo de flora. La solución, como asegura el autor del informe, Alan Hamilton, es proporcionar a las comunidades locales incentivos para proteger estas plantas. En Alicante se ha creado el primer banco de semillas de plantas medicinales y aromáticas en España, con la finalidad de conservar las especies con más cualidades y también aquéllas que se encuentren en peligro de extinción.

Fitomedicamentos mexicanos

En el Centro de Investigación Biomédica del Sur (CIBS), del Instituto Mexicano del Seguro Social, se desarrollan diversos fitomedicamentos (fármacos creados a partir de plantas medicinales) que pueden ser la respuesta a enfermedades como la hipertensión arterial, infecciones producidas por hongos en las uñas (tiña), ansiedad y padecimientos crónico degenerativos como la diabetes. Entre muchas de las ventajas que ofrecen los fitomedicamentos está la de no causar efectos secundarios como suele ocurrir con algunos productos alopáticos. Creado en 1985, es el único centro de investigación en el continente americano que realiza un trabajo integral basado en la medicina tradicional mexicana y en la investigación farmacológica, fotoquímica, biotecnológica y clínica toxicológica de las plantas medicinales.