5 tips vs enfermedades respiratorias
POR: Consuelo Hernández
Editora de Salud180.com, egresada de la UAM-X. Disfruta de la música y la naturaleza. Fan del ciclismo y del buen humor.
Las enfermedades respiratorias son muy frecuentes en la época de invierno, sobre todo la gripe, amigdalitis, bronquitis, pulmonía y malestar en las anginas. El virus de éstas entra por la nariz o la boca, y viaja hacia la garganta, bronquios y pulmones.
De acuerdo con Alejandro Macías Hernández, jefe del área de Epidemiología Hospitalaria del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición “Salvador Zubián”, los síntomas que se presentan con este tipo de padecimientos son:
- Tos
- Catarro
- Dolor de cabeza
- Dolor de garganta y oídos
- Malestar general
- Aumento en la temperatura corporal
Macías Hernández asegura que los virus se transmiten por contacto directo, a través del saludo de mano o beso, así como por los estornudos.
La influenza estacional, uno de los virus más comunes de las infecciones respiratorias, se presenta entre los meses de octubre a marzo y afecta los bronquios y pulmones, principalmente, de adultos mayores de 65 años, personas con enfermedades crónicas y niños pequeños.
Por esta razón, es muy importante que este sector de la población se vacune contra ese padecimiento, en cualquier institución pública de salud.
Por otra parte, el médico señala que los seres humanos se adaptan muy fácilmente a los cambios de clima; sin embargo, es importante tomar algunas precauciones en la temporada de invierno. Aquí te damos algunos tips para evitar las infecciones respiratorias:
- Abrígate muy bien (chamarra, bufandas, gorra, guantes)
- Lleva una alimentación saludable y balanceada, rica en vitamina C
- Lávate las manos de forma frecuente
- Evita tocarte la cara con las manos sucias, debido a que el virus se adhiere de forma indirecta.
- Disminuye los excesos, es decir, evita las bebidas alcohólicas y el tabaco
Para las personas que tienen alguna enfermedad respiratoria, el especialista recomienda tomar líquidos abundantes, evitar la automedicación, mantener libre de secreciones las vías respiratorias, realizar aseos nasales de agua tibia con sal, continuar la alimentación habitual y acudir con el médico.
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