Mitos y realidades de la depilación láser

Aunque la depilación láser es un método que cada día cobra más fuerza, aunque aún existen dudas respecto a su efectividad, seguridad y a los daños que puede ocasionar el láser en la piel.

Muchos de estos cuestionamientos deben su origen a las malas prácticas que realizan clínicas clandestinas o spas con personal sin certificación, ni experiencia, se encargan de la depilación láser, convirtiéndola en un procedimiento doloroso para los pacientes, que incluso causa daños a la piel; irritación y  ámpulas hasta quemaduras.

Además, algunos sitios garantizan la eliminación del vello de por vida, hecho que representa uno de los principales mitos de la depilación, ya que si bien se trata de un método permanente, éste no es definitivo.

Expertos en el tema señalan que ni el láser, la luz pulsada o cualquier otra herramienta que se utiliza para depilar, puede ofrecer resultados definitivos, debido a que siempre pueden aparecer nuevos vellos o bien, porque algunas pieles no responden al procedimiento.

Mitos y realidades

Algunas de las ideas en materia de depilación láser son un mito; conocerlas  es importante para aclara las dudas más frecuentes en torno al tema:

1.    La depilación láser provoca cáncer de piel: Mito

Debido a su efecto selectivo en la piel, el láser no es causante de esta enfermedad. Sin embargo, pacientes con historial de cáncer en la piel sí deben ser revisados por un dermatólogo previo a la aplicación del mismo.
 
2.    Cualquier persona es candidata a la depilación láser: Mito
Siempre es necesario tener una consulta de valoración con el especialista, para que determine si una persona es candidata o no para utilizar este método de depilación. Por ejemplo, si un individuo presenta quemaduras, heridas, irritación o alguna enfermedad cutánea como herpes u hongos, no podrá someterse a este tratamiento.
 
De igual forma las mujeres embarazadas o en periodo de lactancia no podrán depilarse a través de este método; mismo caso aplica a quienes viven con diabetes o a quienes estén tomando algún medicamento deberán consultar a su médico antes de exponerse al láser.
 
3.    Un tratamiento completo de depilación láser requiere varias sesiones independientemente de la zona del cuerpo que se trate: Realidad

El láser actúa de manera efectiva sobre el vello que se encuentra en la etapa inicial de crecimiento, conocida como anágena, pero desafortunadamente no todos pasan por esta fase al mismo tiempo. Es por ello que se necesitan varias sesiones para eliminarlo por completo; en promedio son de 6 a 8 dependiendo de la zona a tratar, el estado de salud del paciente y el tipo de piel.
 
Una vez terminado el tratamiento, es necesario realizar algunas sesiones extras de mantenimiento; existen folículos que pueden quedar en reposo hasta por seis años.
 
Cabe destacar que si el láser es utilizado por un especialista y si se emite la carga correcta de luz, la depilación no tiene que ser dolorosa por lo que no será necesario el uso de anestesia. 
 
4.    No se puede depilar ninguna área del cuerpo después del bronceado: Realidad
Debido a la fotosensibilidad  y mayor concentración de melanina en una dermis bronceada, los especialistas recomiendan la abstención al tratamiento durante un periodo determinado para no comprometer la salud de la piel.
 
5.    El haz de luz del láser puede dañar los tejidos que rodean el folículo piloso. Mito
La luz que emite el láser  se absorbe  de forma selectiva en la melanina del folículo piloso, lo que provoca un daño directo que trae consigo la eliminación del vello.

Si bien, el mayor beneficio de la depilación láser es que ofrece resultados permanentes por un largo periodo de tiempo, también tiene otras ventajas: se puede aplicar en cualquier zona del cuerpo (excepto el área de los ojos), tiene los mismos efectos en hombres y mujeres, no causa dolor, es sencilla, segura y no provoca efectos secundarios.