Este es el resultado de trabajar ocho horas diarias

Compartir en Instagram se abrirá una nueva ventana
Guardar en Favoritos
Guardar en Favoritos
El mundo corporativo confunde la productividad y la asocia con cantidad y no calidad. Foto: Getty Images
Salud180, El estilo de vida saludable

POR: Dinero en Imagen

Sitio especializado en economía, finanzas y tecnología que ofrece contenidos para volver innovadores a nuestros lectores.

25-08-2015

¿Eres de los que se queda hasta tarde en la oficina para que digan que eres muy productivo? Pues te equivocas, porque esta cualidad no se enfoca en la cantidad de horas trabajadas sino en los resultados a corto y largo plazo.

 

Trabajar ocho horas, un horario que fue instituido en 1800, no se alinea con un trabajo eficiente; es mejor trabajar menos horas y de forma más inteligente, de lo contrario estaremos cansados, estresados y seremos lo opuesto a un empleado destacado.

 

La realidad es que debemos trabajar cuando somos más productivos, aunque a pesar del momento que sea, es preciso seguir una regla: tener pausas durante la jornada para que nuestro cerebro recupere y procese la información.

 

Estas son los argumentos por los que trabajar ocho horas no tiene ningún sentido...

 

1. La costumbre de trabajar ocho horas al día llegó con la revolución industrial ya que para maximizar la producción, las fábricas necesitaban fijar horarios a sus trabajadores.

 

2. Quien propuso esta norma, Robert Owen, proponía dividir el día en tres partes: ocho horas para trabajar, ocho para recrearte y ocho para descansar. Si tu horario es de 7 am a 3 pm, puede sonar bien, pero si trabajas de 9 a 5 ya no lo es tanto; menos aún si tienes un horario intermedio, como 11 a 7. Tus ocho horas de recreación terminarían a las 3 de la mañana. ¿Eso está bien?

 

3.  Finalmente, Henry Ford implementó las ocho horas de trabajo en 1926. Pero, ¿por qué debemos cambiar ese esquema?

 

Simplemente porque las ocho horas al día de trabajo ya no encajan con nuestro estilo de vida y nuestras prácticas de trabajo actuales. Los negocios confunden la productividad y la asocian con cantidad y no calidad.

 

 

4.  Trabajar largas horas causa cansancio, estrés y frustración, baja productividad (justamente lo que no quieren tus jefes) y menor compromiso con tu trabajo.

 

5. Timothy Ferriss, autor del libro La semana laboral de 4 horas, asegura que la mejor forma de trabajar es hacerlo sólo cuando te sientes más eficiente, despejado y descansado porque así la vida es más productiva y se disfruta más.

 

6. Así que lo ideal es que para maximizar tu productividad encuentres un patrón de estilo de vida que te permita planear tus tareas más demandantes, durante tus horas más productivas, y enfocarte en una sola cosa a la vez para evitar caer en el multitasking.

 

7. De acuerdo con diversos estudios el cerebro puede enfocarse de 90 a 120 minutos. Después necesita un descanso. Por ello, hay algunas alternativas para sobrellevar las ocho horas de trabajo y ser productivo sin caer en el estrés y la frustración: una es planear dos momentos al día de 15 minutos de descanso; uno a media mañana y otro a media tarde.

 

Otra solución es aplicar la técnica Pomodoro y trabajar en lapsos de 25 minutos con descansos de 5 minutos. Otra más es dividir tu día en 90 minutos y asignar a cada bloque una tarea; ya concluida cada una descansar 20 minutos.

 

Cuéntanos, ¿cómo te afecta tu horario laboral y qué hacer para sobrellevarlo y ser productivo?

Compartir en Instagram se abrirá una nueva ventana
Guardar en Favoritos
Guardar en Favoritos
Lo que pasa en la red