5 hábitos que puedes cambiar si vives en Estados Unidos

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Uno de los hábitos que puedes cambiar si vives en Estados Unidos es preferir el agua natural que los refrescos. Cortesía: Photos.com
Salud180, El estilo de vida saludable

POR: Salud180.com

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29-07-2014

De acuerdo con la Organización de Naciones Unidas, Estados Unidos es calificado como el tercer mejor país del mundo para vivir por sus elevados indicadores de calidad de vida, aunque también es una nación con serios problemas de obesidad.


 

Información del Centro de Prevención y Control de Enfermedades de Estados Unidos apunta que 19.3 millones de latinos que radican en el país vecino padecen obesidad y de este grupo, los más propensos a sufrir sobrepeso son los mexicoamericanos.


 

Estos datos son un “foco rojo” entre esta numerosa población que va en busca de mejores opciones de vida. Una vez establecidos, adoptan hábitos comunes de los norteamericanos que incluyen el sedentarismo y una dieta rica en carbohidratos, azúcares, comida rápida y procesada, régimen que en la mayoría de los casos compromete su salud.


 

La obesidad se detona por dos factores principales: las calorías consumidas y las que se gastan. Si se consumen más de las usadas habrá que cambiar la ecuación, explica José Szapocznik, jefe de Epidemiología y Salud Pública de la Escuela de Medicina Miller de la Universidad de Miami.


 

Puedes empezar a hacer cambios en tu estilo de vida para que esta epidemia mundial no te dañe. Por ello, Salud180 comparte 5 hábitos que puedes cambiar si vives en Estados Unidos.

Conserva buenas prácticas alimentarias

 

El ambiente, falta de ejercicio, cambios en el sistema de transporte e indudablemente el tipo de alimentación influyen en el peso de las personas que con pequeños cambios se puede hacer la diferencia y comenzar a aumentar la actividad física diaria, además de aumentar la disponibilidad de comidas saludables en casa.

 

1. Bebidas. Estados Unidos es el segundo consumidor de refrescos en el mundo con 118 litros al año por habitantes. Este hábito lo puedes empezar a cambiar al elegir agua natural como bebida principal del día.

 

Aunque el agua embotellada en algunas ciudades es más cara que los refrescos, la opción puede ser tomarla del grifo que es limpia, segura, y saludable, o hervirla.

 

Bebe tan solo un vaso más de agua al día y podrás marcar una gran diferencia en tu salud, energía y la manera en que te sientes. Así que bebe más y compruébalo por ti mismo, afirma Michelle Obama, la primera dama de EU.

 

2. Grasa. Los estadounidense llevan una dieta alta en grasas saturadas, muestra de ello son las hamburguesas y la comida frita. Para evitar este tipo de alimentación puedes reemplazarlos con productos bajos en grasas y menos condimentados.

 

Una buena medida es comparar el etiquetado de los alimentos. Un gramo o menos de grasa saturada por porción tienen un bajo contenido de grasa saturada.

 

Además, la Administración de Alimentos y Medicinas (FDA) propuso medidas para eliminar las grasas trans o saturadas en la comida procesada, ya que son altamente nocivas para el organismo, de aprobarse la iniciativa se podrían prevenir 20,000 ataques al corazón al año y cerca de 7,000 muertes por enfermedades cardiacas.

 

La American Diabetes Association recomienda cambiar un palito de queso para el bocadillo de la tarde por doce almendras que tienen aproximadamente las mismas calorías, pero beneficias la salud de tu corazón con este sencillo cambio.

 

3. Incluir vegetales y frutas. Felipe Lobelo, especialista en nutrición de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades aconseja  consumir frutas y verduras para combatir la obesidad.

 

Una buena costumbre es que los padres incluyan  frutas a la dieta de sus hijos reemplazando los dulces y las grasas a la hora de comer un bocadillo.

 

Para aumentar el consumo de verduras, prepara las que más te gusten con un poco de condimento, esto te ayudará a reducir el consumo de grasas y comidas altas en calorías.

 

4. Sedentarismo. Oscar Incarbone, coordinador del programa de actividad física del Plan Argentina Saludable del Ministerio de Salud de la Nación, sugiere durante la jornada laboral realizar pausas de 10 a 15 minutos cada dos o tres horas para hacer estiramientos, controlar la respiración y mantener una postura adecuada para combatir el sedentarismo. Además de caminar en lugar de utilizar el automóvil en distancias cortas.

 

Con pequeñas acciones se logran grandes cambios, comienza por moverte más y cambiar tus hábitos alimentarios, hazlo de una manera natural y tu cuerpo lo agradecerá. 

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