4 maneras de saciar tus antojos

Sabemos que una dieta saludable debe incluir 3 comidas principales y al menos 2 colaciones, una matutina y una vespertina; sin embargo, no es raro que a la mitad de la mañana o de la tarde lleguemos a sentir el antojo por comer algo.

Generalmente, al cabo de un par de horas de haber tenido nuestra última comida, podemos llegar a tener hambre y, en ocasiones, es tanta la ansiedad que podemos llegar a consumir alimentos de más sólo por sentir antojo.

Una de las razones por la que llegamos a sentir antojo obedece a que no consumimos alimentos que nos provoquen saciedad durante las comidas. Por ello, a continuación te presentamos algunas ideas para favorecer esta sensación de saciedad y dejar de sentir antojo o hambre durante el día:
 

1. Prefiere el cereal de salvado de trigo sobre el pan blanco. A pesar de que ambos alimentos contienen carbohidratos, los contenidos en el cereal de salvado de trigo tienen un efecto de mayor saciedad, ya que la fibra que contiene ayuda a retrasar la absorción de glucosa en el intestino y evita las subidas y bajadas de azúcar que nos provocan tanta hambre.
 

2. Elige una naranja en lugar de un plátano. Ambas frutas nos brindan vitaminas, pero si eres de los que por practicidad se comen un plátano para quitarse el hambre, haz la prueba y come una naranja. Verás que desde el simple hecho de tener que masticar por más tiempo los gajos de la naranja, te sentirás con menos.

3. Cambia las frituras por palomitas de maíz. Es común abrir una bolsa de papas fritas para saciar el antojo de media tarde, pero la recomendación es cambiar por palomitas de maíz naturales, ya que además de ser bajas en grasa, aportan fibra a la dieta lo que nos hace sentir sin hambre por más tiempo.
 

4. Verduras con aderezo en lugar de galletas. Las galletas son alimentos muy socorridos al sentir antojo o hambre, sin embargo es probable que no tengan un efecto de saciedad muy prolongado, por lo que vale la pena pensar en verduras como pepinos, zanahorias y jícamas que pueden ser acompañadas con algún aderezo alto en proteínas y bajo en grasa, a base de yogurt o jocoque.

Haz la prueba y por una semana realiza los cambios mencionados, verás que ya no te quedarás con tanta hambre ni vas a sentir antojo de manera recurrente, además de que te sentirás satisfecho por más tiempo.